El presidente ruso, Vladímir Putin, anunció este martes una extensión de la cuarentena que rige en Rusia debido a la pandemia de COVID-19 hasta el próximo 11 de mayo, y agregó que el país “enfrentará una nueva y agotadora fase de la pandemia”, en una declaración televisiva.

“El aumento diario de casos se ha estabilizado relativamente, pero esto no debe tranquilizarnos, porque la situación es muy grave”, agregó Putin. “El pico (de la curva de la epidemia) todavía no ha pasado, y estamos a punto de enfrentarnos a una nueva y agotadora fase de la pandemia”, agregó, antes de zanjar asegurando que “la amenaza mortal del virus continúa”.

Putin explicó que después de la nueva fecha del 11 de mayo, el país podría empezar a reducir gradualmente las restricciones, algo para lo que ordenó a su gobierno empezar a hacer planes a partir del 5 de mayo.

“No hablamos de una cancelación simultánea de restricciones, debemos prepararnos para un duro recorrido. Tenemos que tomar en consideración todos los riesgos y demostrar sensibilidad para no retroceder y perder todo lo que hasta ahora estamos logrando”, apuntilló el líder del Kremlin.

En este sentido, Putin admitió que actualmente en Rusia “faltan algunos productos” sanitarios para enfrenar la pandemia, por lo que ordenó al gobierno que incremente el ritmo de producción de los mismos.

Putin ha enfrentado críticas las últimas semanas por su gestión de la conmemoración del Día de la Victoria contra las tropas nazis en la II Guerra Mundial, que se celebra cada 9 de mayo. Este 2020 marca el 75 aniversario de la entrada soviética en Berlín en 1945, y el mandatario había preparado “la mayor celebración de la historia”. Aunque finalmente, la semana pasada, canceló el desfile militar, su reacción fue tardía y Rusia se ha visto obligada a poner en aislamiento a miles de militares que participaron en los ensayos.