Opinión

Reflexiones necesarias

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La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

El año inició con algunos acontecimientos de preocupación mayor en el ámbito internacional, que van desde los incendios ocurridos en Australia y la tendencia creciente de calentamiento global hasta los sucesos vinculados al asesinato de un importante militar iraní en territorio iraquí como producto de un operativo militar estadunidense.

En el primer caso, si bien se trata de un fenómeno relacionado estrictamente con el medio ambiente, antes que otra cosa, nos viene a recordar lo evidente que es el hecho de que la degradación del entorno natural del mundo o de sus partes, puede tener muy graves consecuencias para el mantenimiento de la estabilidad global más allá de la tragedia ecológica que ello supone. Tal vez solamente por ello vale la pena mencionarlo. De pasada hay que recordar que desde hace ya varios años el Consejo de Seguridad de la ONU ha dedicado varias reuniones de alto nivel específicamente dedicadas a los riesgos que el deterioro del medio ambiente entraña potencialmente en los conflictos mundiales; la desertificación o la escasez de agua potable son apenas algunos de los elementos que podrían contribuir a la exacerbación de los conflictos, como lo hemos expuesto en ocasiones anteriores. El propio secretario general de las Naciones Unidas ha señalado que uno de los mayores riesgos contemporáneos al mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales lo constituye la destrucción gradual del medio ambiente. En el segundo caso, las acciones militares descritas han subrayado el potencial desestabilizador que pueden tener ciertas decisiones que pueden considerarse como apresuradas o aventuradas. Se trata de una de las regiones del mundo en permanente evolución y convulsión, en las que parece claro —no para todos, obviamente— que es fundamental andarse con pies de plomo.

Durante este primer mes del año recientemente iniciado, el CSONU bajo la presidencia mensual de Vietnam, uno de sus diez miembros electos, ha convocado a un debate a nivel ministerial sobre el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales y la necesidad de reafirmar el compromiso respectos de la defensa de la Carta de la ONU. No es un debate nuevo sin duda, pero sí muy necesario en las actuales circunstancias dada la naturaleza de los sucesos ocurridos en la actual coyuntura política internacional y las cambiantes posturas —erráticas podría decirse en algunos casos— nacionales de los principales actores globales en distintos frentes del acontecer político, económico y social, y que como se sabe son también miembros permanentes del CSONU. De esta suerte, el debate ministerial tiene como propósito hacer hincapié en la importancia de respetar los principios de la ONU, particularmente en el contexto de la paz y la seguridad internacional, y reflexionar sobre las posibles acciones que el CSONU, el sistema de la ONU, las organizaciones regionales y subregionales, y los Estados miembros de la Organización pueden adoptar para la promoción y defensa de la Carta constitutiva de la ONU, sobre todo para reforzar la prevención de los conflictos y la resolución pacífica de las disputas, y en general para mejorar la eficacia del Consejo y sus acciones para responder a las situaciones de crisis y los conflictos. No es un debate sencillo, pues desde siempre han persistido importantes diferencias entre sus miembros sobre la interpretación de ciertas disposiciones de la Carta sobre la acción colectiva, principalmente la prevista en su capítulo VII, frente a la importancia de respetar la soberanía de los Estados, la necesidad de respetar el derecho internacional y los derechos humanos, entre otros aspectos fundamentales en las situaciones de conflicto y en el tipo de respuesta que debe ofrecer el Consejo ante ellas.

A nadie escapa el hecho de que el CSONU se encuentra dividido y que ha carecido del consenso necesario en su actuar, como lo ha evidenciado, entre otros, el conflicto sirio, ya en su octavo año de recrudecimiento. A pesar de ello, en la actual coyuntura, si bien por razones específicas de la misma que la hacen diferente a las del pasado y le otorgan su peculiaridad, se hace necesaria y hasta imprescindible la reflexión colectiva propuesta por la presidencia vietnamita, no obstante que puedan repetirse las cosas que todos sabemos que son importantes y que siempre debieron hacerse.

gpuenteo@hotmail.com