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“Estoy aquí”, sonaba luego de más de una hora de retraso, en el Coloso de Santa Úrsula, donde la colombiana era esperada por más de 50 mil fanáticos, que sin importar la lluvia, estaban listos para interpretar sus mejores éxitos luego de siete años de ausencia en México.
Minutos antes de la presentación, Shakira publicó un video en sus redes, donde mencionó “así llueva, truene o relampaguee, yo saldré a cantar”, y lo cumplió. Las luces se encendieron en punto de las 21:50 horas y el público enloqueció desde el primer instante.
Una presentación de las más esperadas por parte de los fanáticos, que corearon al ritmo de “Loba”, “Si te vas” y “Clandestino”, repertorio que forma parte de su gira El Dorado World Tour, con el que ha recorrido gran parte del mundo, y gracias al cual, por fin se rencontró con su público mexicano.
Con ese movimiento de caderas que la caracteriza, se dispuso a disfrutar de cada segundo del espectáculo, y con distintos tipos de vestuario dejó brillar a sus caderas en el centro del escenario. Shakira agradeció al público por su lealtad a lo largo de su carrera y declaró que México es su segunda casa.
“Gracias a todos los que hicieron posible esta noche, estaba muy nerviosa antes de comenzar y sí, debo confesar que lloré, eran muchos años sin venir, pero ustedes siempre me han recibido como mi familia, esta es mi segunda casa y eso me pone muy contenta, vamos a bailar México”, expresó.
El espectáculo continuó al ritmo de “Suerte”, “Antología”, “Waka waka” y “Hips don’t lie”, temas que se inmortalizaron en el recuerdo de los asistentes que no titubearon en corear al unísono, mientras los fuegos pirotécnicos acompañaron cada una de las interpretaciones.
Una noche dorada para los presentes, algunos con lágrimas en los ojos, expresaron la felicidad de ver a su ídolo sobre el escenario. En repetidas ocasiones Shak, como también la llaman sus fans, se acercó al público para sentir la calidez de su gente.
Luego de una ausencia tan prolongada, expresó “no podía más sin verlos, esta noche es muy especial para mí, quiero llevármelos a todos en mi corazón, gracias México”, así continuó con “Me enamoré”, “Perro fiel”, “Suerte”, “Nada”, “Dónde estás corazón” y “Amarillo”; algunos de estos los interpretó de un modo muy romántico, ad hoc al ambiente lluvioso, con los que formó un set acústico.
“Shakira, Shakira, Shakira”, se escuchaba en múltiples ocasiones por parte de los presentes, y la colombiana respondía con una sonrisa y entregando lo mejor de sí arriba del escenario, lo que hizo que los asistentes salieran satisfechos del concierto y con ansias de tenerla nuevamente de regreso.
Una ráfaga de fuegos pirotécnicos se hizo presente en el interior del Estadio Azteca y así fue como se despidió la cantante de la primera de dos presentaciones en dicho recinto, no sin antes interpretar “La bicicleta” y “Chantaje”.
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