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Suicidio asistido de una mujer reaviva el debate sobre la eutanasia en España

Ángel Hernández ayudó a morir a su mujer, María José Carrasco, enferma terminal de esclerosis, y lo grabó en video. Campañas y manifestaciones piden a la fiscalía que no le impute.

Ángel Hernández ayudó a morir a su mujer, María José Carrasco, enferma terminal de esclerosis, y lo grabó en video. Campañas y manifestaciones piden a la fiscalía que no le impute.

Suicidio asistido de una mujer reaviva el debate sobre la eutanasia en España

Suicidio asistido de una mujer reaviva el debate sobre la eutanasia en España

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

El debate sobre la eutanasia ha regresado a primera plana en España, en plena precampaña electoral, tras el caso de un hombre, Ángel Hernández, de 70 años, que este miércoles ayudó a morir a su esposa, María José Carrasco, de 61 años y enferma terminal de esclerosis múltiple.

Hernández grabó primero el testimonio de su esposa, que manifestaba claramente su deseo de morir, y al día siguiente de nuevo dejó una cámara grabando mientras, previo consentimiento, le daba a beber el veneno que instantes después la mató.

Las imágenes han causado un fuerte impacto en España (pese a que la mayoría de los medios de comunicación han eliminado de la grabación el momento en que ­Carrasco muere), y han contribuido a aumentar la notoriedad del caso.

Además del video, Ángel escribió hace días una carta en la que relataba el sufrimiento de su esposa y anunciaba la decisión de ayudarla a morir.

El hombre fue detenido poco después de la eutanasia de su mujer, acusado del delito de asistencia al suicidio, pero este jueves quedó en libertad provisional después de declarar en el juzgado, donde admitió todos los hechos.

OLA DE SOLIDARIDAD. Una vez liberado, este viernes, desde su casa y tras pasar la primera noche sin María José, Ángel explicó al diario El País que los policías que acudieron a detenerlo le recordaron que “es la ley", pero que a la vez reconocieron que ellos “habrían hecho lo mismo" en su lugar.

La muerte de Carrasco y la historia de su ahora viudo han conmovido a la sociedad española: una campaña en la plataforma Change.org ha reunido 300 mil firmas en apenas 24 horas para pedir a la fiscalía española “que no presente cargos” contra Ángel.

Además, ayer, alrededor de cien personas, muchas de ellas gente mayor, se manifestaron en la capital española, pese al clima lluvioso del día, para mostrar su apoyo a Ángel y para exigir que se regule la eutanasia.

UN PROCESO LENTO. Actualmente, la ley española castiga con penas de dos a diez años a quien ayude a otra persona a suicidarse. El gobierno socialista de Pedro Sánchez prometió regular la eutanasia desde 2018, pero la derecha, conformada por Partido Popular y Ciudadanos, han bloqueado la tramitación de la ley poniendo trabas en el Congreso.

Ángel explicó en su carta que estaba esperando, con María José, a que se aprobara la nueva ley, pero que la convocatoria electoral frustró sus esperanzas.

Según una encuesta del estatal Centro de Investigaciones Sociológicas español, el 70 por ciento de españoles está a favor de legalizar la muerte digna.