Ya han pasado más de 10 años desde que Grupo Aeroméxico, a través de sus principales ejecutivos diera un golpe financiero fatal a Mexicana de Aviación, que nos comenta apenas llevaba 6 meses en concurso mercantil.

Y es que en un total desapego a la ley, violando los derechos económicos de los trabajadores de Mexicana de Aviación y actuando por encima de los acreedores del concurso mercantil, funcionarios de Aeroméxico firmaron con el entonces Administrador Único de Mexicana, Javier Christlieb, un contrato por el cual Aeroméxico compró la empresa Alas de America en sólo mil pesos, así como que su Sindicato Independencia se quedara con activos de Mexicana de Aviación, a través de un “embargo" arreglado con el propio Christlieb, situación que le ha representado a Aeroméxico ganancias millonarias al margen de la ley.A la fecha se sigue por la Fiscalía de la CDMX una investigación por los delitos cometidos por Aeroméxico y sus directivos. Sin embargo, éstos siguen evadiendo a la justicia, como es el caso del director de Finanzas, Ricardo Sanchez Baker, quien injustificadamente no acudía a los citatorios de la Fiscalía, hasta que ésta le puso medida de apremio, situación que demuestra que en su momento pudo evadir la justicia si no se tomaban las medidas adecuadas por parte de la autoridad. Afortunadamente, llegó el momento de hacer justicia. MULTA. El Pleno de la Comisión Federal de Competencia Económica, que lleva Alejandra Palacios, declaró el incumplimiento de una parte de los compromisos adquiridos por Praxair y, en consecuencia, le impuso la multa de 237 millones 876 mil pesos. Además, se otorgó un plazo de 45 días hábiles a partir de la notificación de esta resolución para que compruebe el cumplimiento de todos los compromisos adquiridos. En caso contrario, le podrá imponer multas como medida de apremio hasta por el equivalente a mil 500 veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA) por cada día que transcurra sin cumplir lo ordenadQUERELLA. El exrector de la UDLAP, Luis Ernesto Derbez, al asociarse con la Fundación Mary Street Jeskins puso en riesgo el prestigio que por tanto tiempo le costó construir, pues un mandato jurídico emitido por un juez, para tomar la administración de la Universidad de las Américas en Puebla y vigilar que los recursos que de ella emanan se apliquen con transparencia, dio pie a que en las primeras auditorías legales y contables se encontraran malos manejos en donde está implicado el ahora exrector Derbez y varios colaboradores de menor rango, lo cual hace ver que el ex máximo director de esa casa de estudios ya se encuentre preocupado, pues las denuncias de tipo penal ya están en proceso de ejecución.

El patronato de la UDLAP fue nombrado por la Junta de Supervisión de Instituciones Privadas de Beneficencia de Puebla. Todo esto se dio con bases legales y conforme a derecho y asegurando que seguirá con normalidad el plan de estudios programado para el ciclo escolar vigente y el derecho laboral de los trabajadores académicos y administrativos; así como el cumplimiento de los pagos de servicios.