Hoy hice el experimento de utilizar el transporte que pusieron para auxiliar a los usuarios de la L12. Son camiones de RTP que siguen la misma ruta de las estaciones, pero por arriba.

Obviamente, uno no espera hacer el mismo tiempo que en el Metro, pero el tránsito está de locos. Abordé el camión a las 3:00 pm en zapata, he avanzado cinco estaciones y llevo 35 minutos de traslado, casi 20 minutos más de lo normal y en hora no pico.

Ni pensar en llegar a mi cita médica.

Al salir a una cita al mediodía, busqué alternativas para poder llegar lo más pronto a División del Norte. Anteriormente hacía 25 a 30 minutos por la Línea 12. Hoy, sólo para llegar al metro UAMI de la Línea 8 que va de Constitución a Garibaldi, hice 33 minutos y en taxi... Me metí a la estación UAMI y me trasladé a Chabacano para transbordar a la línea 9 y bajarme en Centro Médico y de ahí transbordar nuevamente a la L3 y bajarme en División del Norte. Pese a tanto transbordo y tránsito hice mi recorrido en una hora con 15 minutos.

Lo paradójico es que todo esté tráfico se da, aunque no estamos en semáforo epidemiológico verde, por lo tanto, estudiantes y maestros aún están en casa.

Afortunadamente, yo aún trabajo desde casa y sólo salgo por alguna cita médica o al súper... soy afortunada, pero los miles de personas que tienen que hacer este recorrido diariamente... es para volverse locos.

Sin embargo, la gente se espera por el costo del pasaje, porque buscar cualquier ruta alterna les aumenta hasta en 600% el costo, sólo en la ida, ni qué decir del regreso.

Verónica trabaja en un corporativo ubicado en Félix Cuevas e Insurgentes, antes se iba en Metro y su trayecto, caótico y todo, por tanta gente, duraba entre 30 y 40 minutos. Ahora debe salir por muy tarde a las 7:15 para poder llegar antes de las 9:00 a.m. y paga hasta seis veces más diariamente. “Por ejemplo, debo pagar un camión para salir a Ermita y un autobús especial para llegar a Insurgentes Sur, son ya 22 pesos, cuando en el Metro eran sólo 5 pesos, además de que debo esperar hasta 20 minutos para que se llene el ‘especial’ y se vaya directo hasta Mixcoac”.

"Como sugerencia a las autoridades, traten de hacer un carril confinado para estos autobuses, quizá sea más caótico para los autos particulares, pero al menos algunos avanzarán, porque tanto Av. Ermita como Av. Tláhuac son de las más conflictivas de esta gran ciudad a cualquier hora del día", señalan algunos usuarios.

Por cierto, llegué a mi cita a las 16:30 horas, tuve que reagendar…