Opinión

Y según, el encierro pandémico nos cambiaría para mejor…

Y según, el encierro pandémico nos cambiaría para mejor…

Y según, el encierro pandémico nos cambiaría para mejor…

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy
No soy afecta a los concursos de belleza y por lo tanto no está dentro de mis prioridades interesarme en atenderlos, sólo que esta vez, tan pronto anunciarse que la bella ganadora había sido una mexicana, orgullosamente chihuahuense para más exactitud, de inmediato me metí a buscar más información sobre ella, ya que antes de su triunfo había leído por ahí que era animalista, descubriéndola además y entonces como vegana convencida, punto de superación al que difícilmente se llega pero que siendo así, la posiciona como persona de una generación que se está revelando con gran empatía hacia la Naturaleza, rechazando el sufrimiento de tantas criaturas usadas como alimento y sobre las que suele ignorarse la tremenda rudeza por la que pasan antes de convertirse en platillo. Ojalá y ahora que tendrá el escrutinio público sobre su espalda, Alma Andrea Meza Carmona logre influir en la cultura de consumo cárnico que, por el bien de todos, urge dejar atrás.Pero antes de saber lo anterior, sépase que andaba yo que me llevaban los demonios básicamente por tres asuntos. A saber: el primero, cuando tras haber visto, el pasado viernes, el documental Mar de Sombras, relativo al rescate de la marsopita de puerto y su vinculación con el crimen organizado y la vejiga de la totoaba, constaté tener razón en mi radical crítica especialmente a la última y más torpe estrategia de la SeMaRNat –en ese tiempo inmerecidamente conducida por Rafael Pacchiano- para dizque recuperar al mamífero marino más amenazado de extinción en el Planeta, consistente en la construcción del famoso “NIDO" donde pretendían mantener cautiva a una especie conocida ampliamente por ser eminentemente elusiva y nerviosa. Asimismo, pude entender que fueron correctos tanto mi percepción inicial como mi tremendo enojo respecto a que la muerte de la “hermosa hembra madura" capturada bajo las órdenes y conducción de una supuesta experta como la “Dra. Cynthia Smith" y, of course, con la anuencia de quien se supone es ¿nuestra? autoridad en la materia (Dr. Lorenzo Rojas Bracho), se debió, en definitiva, a un torpe manejo que resultó en lo que bien pudiera calificarse de ASESINATO CULPOSO por el que todo ese equipo debería ser sometido a juicio, pues, para empezar… ver a todas esas personas sentadas sobre el círculo-red donde la metieron, además, excitadas por la emoción, pataleando dentro del agua cual chiquillos y, encima, escuchar la voz de la mandamás referida determinando que la vaquita estaba súper bien (porque se movía desesperadamente), es simplemente inadmisible. La pobre criatura sólo trataba de huir topando contra la barrera que se lo impedía, manifestando con ello evidente colapso… la típica miopatía por el estrés que estaba cursando y por lo que su vida terminó inútilmente de manera fulminante tan pronto decidieron liberarla, claro, al ver que se les moría literalmente en las manos, lo que quedó documentado. Andaba yo carcomiéndome con lo anterior cuando…El asunto dos se me dejó venir a través de un video donde se observa a un adulto que apalea con severidad a una frágil pequeña de escasos 5 años de edad que también es aventada contra el suelo dejando escuchar suaves lamentos rogando piedad a su violentador, grrrrr, lo que se vino a sumar a un tercer tema que me confrontó contra la humanidad dada la relación que pudiera tener, al ser enterada vía Sandra Segovia-#Todos Somos Animales sí, también tu, de la posible libertad del infeliz que el pasado 9 de abril fue captado en video (tomado por atemorizados familiares) descuartizando, a vil hachazo, a unos cachorritos apenas asomándose a la vida, hecho que aunque delito por haber sucedido en CDMX, en realidad no fue LA CAUSA de su remisión, como sí en cambio el haberse “resistido a la autoridad", amenazándola con un cuchillo.Gracias a lo que se conoce como una tweetstorm se reculó de momento la determinación, procediendo a dejar a Ricardo N. –los criminales sí merecen rígida protección legal ante la consideración de resultar inocentes pese a pruebas contundentes- retenido otros 45 días, lo que no asegura su futuro encarcelamiento ni hace justicia mínima, pero, presuponiéndose la pronta liberación de un criminal que andará como si nada en las calles con todo y sus antecedentes de violencia intrafamiliar y el delito cometido sobre seres supuestamente “sintientes" para la Constitución capitalina, y todo, porque las autoridades competentes no terminan por entender que la violencia contra los compañeros de Planeta es un indicativo cri-mi-nal que requiere inmediata, contundente y radical intervención. Apuesto incluso que si se investiga a fondo la conducta del cobarde que apaleó a la niñita, detrás habrá agresión hacia algún animal.producciones_serengueti@yahoo.commarielenahoyo8@gmail.com