Para nadie es un secreto que las esperanzas de cualquier equipo están cimentadas en el hombre que será su quarterback; se pueden tener ciertas dudas en algunas otras posiciones, pero jamás en quien está detrás del centro, de quien manda las jugadas, de quien lanza el balón.
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En 2025 existen, como pocos años atrás, dudas en dicha posición para varias franquicias, y sin temor a equivocarme pondría en primer sitio a los Potros de Indianápolis con Anthony Richardson, quien entra en su tercer año con muchas dudas y pocos resultados claros. Para ser sinceros, creo que la organización lo sabe, no por nada firmaron a Daniel Jones, otro ex primera ronda de Draft con los Gigantes de Nueva York que, a pesar de ser desechado por los neoyorkinos, es por mucho mejor que Richardson, y con mayor experiencia, compromiso y ética de trabajo. Un dato que delata el bajo nivel de Richardson es su bajísimo porcentaje de efectividad, 47 por ciento en 2024. Quizá iniciará como titular por aquello de la jerarquía de que fue primera selección colegial en 2023, pero pronto será sustituido.
OXIDADO
El siguiente en la lista es JJ McCarthy, de los Vikingos de Minnesota, su primera selección colegial en 2024, con grandes credenciales del colegial por su trabajo en Michigan, pero que, por donde le busquen, está más que oxidado para arrancar en la NFL después de que en su primer año no vio acción tras romperse el ligamento cruzado anterior de una rodilla.
El staff de coacheo de Minnesota, encabezado por Kevin O´Connell, ha dicho que tiene toda la confianza en el chico, pues ha tenido una gran recuperación y ha estado muy involucrado en el proceso de entendimiento del sistema y todo lo que implica, pero siendo sinceros, sabemos que todo se resume a la práctica de juego, al ritmo de juego, a estar en situación real de juego, y McCarthy no ha estado en eso desde enero de 2023 con Michigan.
Los Vikingos apostaron fuerte y se arriesgan igual, ya que en la temporada baja se deshicieron de Sam Darnold, quien los guió de manera más que decente hasta los playoffs. Darnold había asimilado de manera total el sistema de O´Connell, pero sabemos que pesa mucho tener un quarterback de primera ronda sentado en la banca. Es una presión enorme para un coach. Creo que McCarthy pagará caro su novatada en la Liga, el cambio de ritmo del colegial al profesional es brutal para un mariscal de campo, es un proceso normal.
CUESTIÓN DE FE
Continuamos con Cam Ward, la primera selección global del Draft en 2025. Tennessee se lo llevó y espera que sea la solución a su problema en la posición; de hecho se cree que en su primer año sea una revelación, un jugador de impacto inmediato. Brian Callahan, el coach, tiene los fundamentos para desarrollarlo, de eso no se duda pero, de acuerdo con analistas, la generación de mariscales de campo de este año fue “regularcita”, y aunque Ward si fue el pasador mejor calificado de la camada del más reciente reclutamiento, será difícil que despegue en su primer año, después de todo, los Titanes no cuentan con un plantel ofensivo muy talentoso que digamos.
MUCHO RUIDO Y POCAS NUECES
Otro que despierta curiosidad es Michael Penix en Atlanta. De la misma manera que los dos anteriores fue primera selección de los Halcones. Creen tanto en este chico que lo pusieron al mando de la ofensiva los últimos tres juegos y sentaron a un veterano como Kirk Cousins. Penix mostró algunas cosas interesantes, promete, aunque terminó con marca de 1-2. Penix iniciará como titular, por encima de Cousins, pero eso será mayor presión aún, pues un error bastará para regresar a Kirk a la titularidad, después de todo es un sustituto muy caro para el equipo. Penix debe jugar casi perfecto para que el coach Raheem Morris no lo siente, pues también esta de por medio el trabajo del entrenador; y sabemos que el dueño de los Halcones, Arthur Blank, no es un hombre de mucha paciencia.
MANTENERSE, UN RETO
En Seattle las expectativas son altas tras la llegada de Sam Darnold, quien, como ya dijimos llegó de Minnesota. Darnold demostró un gran nivel con los Vikingos en 2024, aunque claro esta decirlo su desempeño fue a menos conforme llegaba el final de la campaña. Para muchos la pregunta es si puede mantener su desempeño toda una campaña y no sólo 10 o 12 semanas. La realidad es que cambia de equipo, un sistema nuevo y eso le pasa factura a cualquier quarterback. La filosofía de coacheo en Seattle no es la misma que en Minnesota, hay una gran diferencia de coacheo entre O´Connell y Mike McDonald, el primero netamente ofensivo, el segundo siempre ha sido coordinador defensivo. Quizá un punto a favor para Darnold será que el coordinador ofensivo de los Halcones Marinos es Klint Kubiak, quien llega de Nueva Orleans, donde hizo un trabajo decente, y en años anteriores estuvo bajo la batuta de Kyle Shanahan en San Francisco.
UN GUION SIMILAR
La gran pregunta de la temporada en cuanto a desempeño detrás del centro es Aaron Rodgers con Pittsburgh. Nadie cuestiona o discute su calidad, habilidad, liderazgo; sin embargo la trama de la historia se asemeja mucho a lo que ocurrió cuando Rodgers llegó a los Jets de Nueva York con exactamente las mismas expectativas y nada se materializó. En Nueva York tenía una muy decente ofensiva y una gran defensiva al igual que en Pittsburgh, pero su actitud y su bajo nivel de juego costaron caro en Nueva York, empezando por la cabeza del coach Robert Saleh.
La historia puede ser diferente con los Acereros, pero lo cierto es que el escenario parece muy similar al anterior, y Rodgers es un tipo especial. Para terminar, baste decir que su contratación fue muy cuestionada por el mismísimo Terry Bradshaw, ganador de cuatro Super Bowls con Pittsburgh, por lo que es una opinión que cuenta y mucho.
ENÉSIMO COMIENZO
Con los Jets la fe esta más que por los cielos con otro nuevo comienzo para Justin Fields, ex primera selección de Chicago en 2021, donde nada pasó, para seguir en Pittsburgh sin pena ni gloria. El coach Aaron Glenn cree en él, por esa razón presionó para su contratación. Glenn fue el coordinador defensivo de Detroit, por lo que no puede ayudar mucho a Fields, sin embargo el coordinador de ataque será Tanner Engstrand, quien era el coordinador de juego de aéreo con los Leones; quizá él pueda, por fin, sacar provecho a Fields, quien no ha podido explotar su capacidad como pasador detrás de la bolsa de protección. Es una gran interrogante.
ESCEPTICISMO TOTAL
Por último tenemos a Spencer Rattler de Nueva Orleans, quien debió sustituir al ahora retirado Derek Carr. Rattler mostró muy poco, apenas y completó el 57 por ciento de sus pases y la ofensiva de los Santos no fue ninguna promesa a futuro. Nueva Orleans decidió no buscar a un veterano en la agencia libre, prefirió seleccionar a otro quarterback de bajo perfil en el draft en la persona de Tyler Shough, así que sin grandes opciones será un trabajo arduo y difícil para Kellen Moore, el flamante nuevo coach de los Santos, que tras ganar el Super Bowl con Filadelfia, como coordinador ofensivo, tiene como premio trata de sacar adelante un barco que al momento no cuenta con piloto confiable al timón. Rattler se perfila para ser el titular, pero terminó con marca de 0-6 en sus aperturas.
Como en todo, puede haber sorpresas y quizá alguno de estos quarterbacks, que ahora levantan dudas y hasta críticas, logren destacar y cerrar alguna bocas, pero lo cierto es que la NFL no es un territorio pacífico para un quarterback.