
Los males crónicos de su procuración y administración; venalidad, insuficiencia, corrupción, nepotismo y demás, no han sido resueltos a través de las sucesivas y ya incontables reformas, cambios, modificaciones, asignaciones de recursos presupuestales o nuevos sistemas (del adversarial al acusatorio, por ejemplo), pero sí ha sido posible agravarlos hasta el actual extremo de falsificar los sufragios en lugar de insistir en una profesionalización rigurosa.
La vieja frase de Carlyle sobre el método electoral: el caos provisto de urnas, ha sido consagrada como fórmula de dominio gubernamental sobre el Poder Judicial. Poco jurídico y nada poderoso; dependiente y sometido a la conveniencia del poder político y su partido con acordeón.
Mucho tiempo pugnaron (quienes después la abolieron) por la autonomía del “abogado de la nación”, como se solía llamar al Procurador General de la República, designado sin consulta u opinión alguna por el presidente en turno. Poco a poco dejó de ser así.
La autonomía se obtuvo mediante fórmulas tortuosas, hasta llegar a la simulación actual, prolongación de la también burlesca condición del defenestrado e insumiso Alejandro Gertz. No es un cambio de ruta. Cuando mucho exhibe la prolongación de la misma mentira: ni Gertz ni Ernestina Godoy podrían demostrar un adarme de independencia. Y si lo hicieran, el destierro sería la consecuencia.
Los casos sonados recientes son significativos. Primero actuar en contra del gobierno de Chihuahua y reaprehender a César Duarte y como segundo, la persecución contra Amparo Casar por hechos ocurridos hace muchos años y sancionados entonces por otro siervo de la 4-T, el mudable panista Juan de Dios Bátiz quien halló en el interminable rollo de Andrés López, el camino de su Damasco. Maestro, le dicen.
Maestro converso y con amnesia, será. Bátiz ha esquivado el origen del problema por el cual ahora se persigue, por segunda ocasión a la señora Casar. ¿Fue o no suicidio la muerte su esposo? No me acuerdo, dice don Bernardo con el expediente de la conveniencia muy a la mano.
--¿No manejó su procuraduría peritajes, investigaciones, documentos serios y profesionales, para determinar las reales circunstancias de un cuerpo venido a tierra desde la Torre de Pemex?
Si no fue así estamos viendo un caso ejemplar de negligencia e incapacidad. Y si fue como se dijo para dar paso al pago de la pensión ahora reclamada como indebida, entonces la responsabilidad recaería en quienes le pagaron, no en la beneficiaria de la prestación.
Debo aclarar algo: la señora Casar ni es mi amiga ni tengo con ella relación alguna. Tampoco me interesan sus libros o su trabajo y en muchas ocasiones he expresado desacuerdo con MCC.
--¿Ya le habrá obedecido el gobierno de Estados Unidos a la IV-T y la IV-T.2 y suspendido su financiamiento a esta ONG?
Sin embargo, la forma como se han ido contra ella, desde el gobierno anterior; por sus hallazgos, opiniones y diagnósticos me parece una ruindad. Si nunca hubiera denunciado, criticado y expuesto los pecados del régimen no sería ahora tratada como enemiga de una legalidad poco respetada en otros casos, especialmente si los infractores pertenecen al movimiento mandón.
Para el registro debemos guardar esta declaración publicada ayer:
“La Fiscalía rechazó que exista una persecución política o una actuación por consigna en el caso de la analista política, quien fue citada a audiencia el próximo martes (mañana) para ser imputada por el delito de uso ilícito de atribuciones y facultades, derivado del cobro de una pensión vitalicia otorgada por Pemex tras la muerte de su esposo”.
Transcrito lo anterior las cosas resultan más sencillas, claras como el agua. Todo lo escrito en los párrafos antecedentes a esta explicación; o sea, lo escrito por mi, es carroñera, patrañosa y buitresca.
Ya la H. Fiscalía lo ha dicho: no hay persecusión política y nuestra obligación es creerlo. ¡Viva el marqués de Croix!