Opinión

La Alcaldía Benito Juárez. Datos para reflexionar

La alcaldía Benito Juárez está dividida en 56 colonias, entre ellas, por su tamaño, población e importancia económica, destacan: la Narvarte, Portales, del Valle, Nápoles, San Pedro de los Pinos, Álamos, San José Insurgentes, Santa Cruz Atoyac, y otras más.

Como cruce obligado para muchas personas que se trasladan en la Zona Metropolitana, cuenta con varias vías de comunicación, ejes viales, 18 estaciones del Sistema de Transporte Colectivo METRO, más de 20 estaciones de Metrobús y otras tantas del Sistema de Transportes Eléctricos conocido como trolebús.

Diariamente sus habitantes conviven con aproximadamente dos millones de visitantes y/o personas en tránsito. Esta gran población flotante se beneficia de la infraestructura urbana de la alcaldía y contribuye a la acelerada actividad económica de la misma.

La Benito Juárez cuenta con gran variedad de lugares educativos, culturales, deportivos y parques. Según cifras oficiales en la demarcación existen: 14 escuelas de nivel preescolar, 35 escuelas de nivel primaria, 51 Secundarias; 21 centros culturales, 30 bibliotecas y 24 parques.

En 2020, los principales grados académicos de la población fueron: licenciatura, 178 mil personas que representa el 48%; bachillerato general 62.7mil personas, es decir 17% del total y con grado de maestría u otros 37.8 mil personas equivalentes al 10%. Para las carreras de Educación Media Superior con mayor número de egresados fueron: Programación, Soporte y mantenimiento de equipo de cómputo y Contabilidad. Respecto de la tasa de analfabetismo, fue de 0.35%.

Ser una de las demarcaciones más transitadas la vuelve dinámica en diversos ámbitos, entre ellos: las obras públicas, incluyendo puentes, remodelación de banquetas, calles y edificios empresariales para oficinas. Uno de los más recientes es el túnel de Río Mixcoac y Río Churubusco, el cual beneficia los tiempos de llegada al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Hablando de vivienda, no podemos dejar de hablar de la gentrificación que se ha acentuado en esta alcaldía. Los sectores de menores ingresos se han expulsado hacia la periferia debido al incremento de nuevas construcciones que terminan por encarecer el valor catastral de las propiedades y con ello, el costo de vida.

En donde había una casa ahora hay edificios. Es una condición muy severa de impacto social, ecológico, urbano muy fuerte. Además, debemos señalar las obras donde se exceden los niveles ostensiblemente, sin importarles que hay una norma que fija los niveles que se pueden construir.

Hoy debemos ser prudentes con el crecimiento demográfico y planificar las características presentes. Estar conscientes ante la nueva estructuración de los espacios y también las nuevas relaciones sociales establecidas entre los nuevos y antiguos residentes, sin dejar de lado las condiciones socioeconómicas de los nuevos y viejos residentes. Se debe establecer un marco específico para esta nueva configuración del espacio, a fin de que exista una transformación en el entorno urbano y un crecimiento natural bajo lógicas y dinámicas lineales.

Construir ciudades que “funcionen” —que sean verdes, resilientes e inclusivas— requiere una intensa coordinación de políticas y decisiones sobre inversión. Los Gobiernos nacionales y locales desempeñan un papel importante: deben actuar ahora, configurar el desarrollo futuro de las ciudades y crear oportunidades para todas las personas.

En síntesis, la Alcaldía Benito Juárez es una demarcación con muchas ventajas frente a otras que la hacen ser una zona atractiva para vivir. Será cuestión de los gobiernos locales garantizar el desarrollo sostenible y sustentable de la misma. Al final, tendrán que pensar en el bienestar de su población, sin expulsar a los más desfavorecidos y sin dejar de garantizar una infraestructura que brinde calidad de vida.