Opinión

Marcelo Ebrard y la Cumbre de Líderes de América del Norte

El trabajo realizado por el canciller Marcelo Ebrard durante la Cumbre de Líderes de América del Norte celebrada en la CDMX durante la semana pasada, lo refuerza en la carrera presidencial. Ebrard tejió fino y logró que no se abordaran públicamente temas incómodos como el relacionado con los diferendos ante la política energética impulsada por el gobierno del presidente López Obrador, que incumple compromisos firmados por los tres gobiernos en el T-MEC, según lo han expresado negociadores de EU y Canadá.

Canciller Marcelo Ebrard

Canciller Marcelo Ebrard

Cuartoscuro

Durante la Cumbre se dio prioridad a los temas que más preocupan al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, como lo es el relacionado con el fenómeno migratorio y lo relativo al tráfico del fentanilo, que ha provocado un número de muertes sin precedente en este país.

Sabemos, sin embargo, que el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, sí trató el tema energético con en el mandatario mexicano durante el último día de la Cumbre, y que el Presidente de México le ofreció recibir a las empresas privadas que tengan inconformidades para establecer un canal de diálogo; o sea trató de mostrar una cara amable ante Trudeau. Por lo demás, a ciencia cierta no sabemos el contenido de diversas pláticas sostenidas en privado entre los tres mandatarios, como por ejemplo lo sucedido en el trayecto entre el Aeropuerto Felipe Ángeles y el Hotel Presidente Intercontinental de Polanco, donde se alojó Biden. Cuesta trabajo creer que el presidente Joe Biden no tratara un tema tan esencial para la relación de los tres países como lo es el energético. Cualquier definición al respecto la sabremos pronto, por los trabajos de las comisiones que se integraron para analizar los temas que provocaron reacciones de preocupación por parte de nuestros dos principales socios comerciales.

Independientemente del énfasis mostrado por los tres gobernantes en relación a la importancia de potenciar la relevancia de este mercado de Norteamérica que aglutina a más de 500 millones de habitantes y cuya fuerza económica y comercial a partir del T-MEC, es ya un bloque de mayor peso que la Unión Europea, los líderes de EU y Canadá, mostraron gran interés en que México se una en el esfuerzo decidido para promover energías limpias, dando prioridad al cuidado del medio ambiente. Este exhorto tuvo como destinatarios principales a Manuel Bartlett y Rocío Nahle.

El Presidente López Obrador desaprovechó una gran oportunidad para hablar sobre temas de mayor trascendencia e interés para los tres países y se dedicó a resaltar los logros de su gobierno, donde dijo ya no hay corrupción, cosa que es muy discutible. Su discurso fue demasiado largo, y poco tenía que ver con la agenda de la Cumbre, sin embargo mostró una actitud bastante mesurada al evitar hablar de sus hermanos cubanos o venezolanos. Esperemos entienda la importancia de trabajar como un bloque que el T-MEC propicia y que traerá, sin duda para México, enormes beneficios en lo económico y social.

REVIVEN A TRADECO DESDE LA SEMAR

Tradeco, que preside Federico Martínez Urmeneta, fue la constructora favorita durante el sexenio de Felipe Calderón y Vicente Fox. Durante la administración peñista fue vetada e inhabilitada por presuntos actos de corrupción. El gobierno de la 4T le levantó el castigo y por medio de la Secretaría de Marina, a cargo del almirante José Rafael Ojeda Durán, le otorgó un nuevo contrato a través de su filial Contratista General de América Latina, S.A. de C.V. El contrato es por 268 millones de pesos y se refiere al dragado de construcción para canales de navegación de la Administración Portuaria Integral de Guaymas, Sonora. Este no es el primer contrato que la SEMAR adjudica a una filial de Grupo Tradeco, así que la polémica constructora de los sexenios panistas está de regreso.

@fer_martinezg

fermx99@hotmail.com