Opinión

¿Cuántas muertas más?

Ni una más, exigencia vigente

El 8 de marzo ya es uno de los días más importantes del calendario cívico nacional.

Lo es porque es un día resistencia ante la violencia machista que destruye la vida de miles de mujeres en nuestro país. Las protestas, incluso las más iracundas, tienen razón de ser.

Revisar las páginas de la prensa que reseña la secuencia incesante de asesinatos es más que suficiente para comprender y solidarizarse con la exigencia de que no haya ni una víctima más.

A lo largo del día de ayer se generaron advertencias de que se espera para la marcha de hoy un estallido de violencia. Si es un intento de intimidación no funcionó.

La policía capitalina tiene habilidades y experiencia de sobra para aislar a los contingentes violentos y, claro, para proteger a las mujeres que ejercerán sus derechos ciudadanos.

Mujeres se manifestaron frente a Palacio Nacional para exigirle al gobierno federal emprenda acciones en contra de la violencia de género y para detener la ola de femicidios que a diario se registran en el país. Las inconformes colocaron cruces rosas en memoria de aquellas mujeres que han sido asesinadas y cuyos crímenes siguen impunes.

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Graciela López

Mikel ante legisladores

Senadores y diputados ya se metieron al tema de los disturbios en el estadio Corregidora.

Los políticos quieren verse las caras con los directivos de la Federación Mexicana de Futbol que por momentos parece que está al margen del Estado de Derecho en el país, pero no.

Mikel Arriola, el presidente de ese organismo, tendrá que comparecer y tratar de explicar lo inexplicable, de justificar lo que no tiene justificación.

Aunque detrás de los equipos hay empresarios y organizaciones poderosas, no significa que sean un poder aparte.

El problema de los grupos de animación que en muchos casos son grupos de choque con un pie en el crimen organizado arranca desde las oficinas de los directivos.

Ya se verá si por fin la federación responde a las interrogantes.

Clases de política

Aumenta día con día la inquietud política entre los activistas de la CNTE.

En la Coordinadora hay grupos que consideran a la 4T otro adversario y se fusionan con los normalistas para conformar grupos de acción directa.

Hay señales claras de que no hay un camino único y que la Coordinadora ya tiene en su seno corrientes distintas, incluso antagónicas.

Hay un grupo que recibió posiciones en el Congreso y que, por lo mismo, dicen los maestros, se han alejado de las bases y son, en los hechos, otros empleados del gobierno.

Lo que sobresale es que la SEP ha perdido interlocución y ya no hay organización magisterial que se acerque a esa dependencia para resolver sus problemas.

Sergio vs. Rocío

La bancada de Morena en San Lázaro da muestras de inestabilidad justo en el momento más inoportuno, pues se acerca la dura prueba de los cambios constitucionales.

Cada vez más voces se alzan para descalificar la conducción de Sergio Gutiérrez Luna quien, dicen, usa el cargo para promoverse como candidato de Morena para el gobierno de Veracruz.

Se ha estado dando vuelo porque nadie le pone un alto, pero eso ya terminó. Comenzaron a surgir demandas de que se transparenten los gastos que realiza que en el fondo son para promoción personal.

Dicen los morenistas que se auto organizó un acto anticipadísimo de campaña en Veracruz con el pretexto de la reforma eléctrica, que curiosamente es el pretexto que usa Rocío Nahle, la secretaría de Energía para buscar el mismo cargo.

Las y los diputados que quieren a Rocío como candidata encabezan la batalla interna contra Gutiérrez Luna