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Catalina Ochoa, Rafael Boudib Jurado y Nezahualcóyotl Zúñiga, jueces del tribunal oral que participaron en el caso de Rubí Marisol Frayre, hija de la asesinada activista Marisela Escobedo, presentaron desde el viernes pasado la renuncia a sus respectivos cargos.
Con ello dejaron sin materia el procedimiento de responsabilidad administrativa seguido en su contra por el Supremo Tribunal, tras haber liberado a Sergio Barraza, asesino confeso de Rubí.
De acuerdo con información de El Diario de Juárez, el Supremo Tribunal de Justicia (STJE) aceptó inmediatamente la renuncia de los jueces, mediante un acuerdo del tribunal dictado el viernes pasado, el cual fue publicado ayer y causó efectos de inmediato.
Las autoridades judiciales informaron que la renuncia deja sin materia el procedimiento de responsabilidad administrativa, ya que éste se entabla sólo contra funcionarios o servidores públicos en funciones.
Tras la aceptación de la renuncia, la presidencia del Poder Judicial notificará de manera oficial al Congreso del Estado para que proceda como corresponda a sus atribuciones en el juicio político que también se instruyó contra los mencionados juzgadores.
La renuncia de los tres jueces se dio en el marco del escándalo jurídico que derivó en la muerte de la activista Escobedo y el inicio de un juicio político histórico en contra de los jueces.
René Medrano, vocero del Supremo Tribunal de Justicia de Chihuahua, confirmó que la renuncia, con carácter de irrevocable, se dio desde el pasado 10 de marzo y fue hasta ayer lunes 14 cuando se publicó.
"El Supremo Tribunal de Justicia del Estado recibió la renuncia con carácter irrevocable al cargo de jueces del Tribunal Oral, que presentaron Catalina Ochoa, Rafael Boudib Jurado y Nezahualcóyotl Zúñiga", informó el vocero de la dependencia.
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