
¡Este 20 de mayo las protagonistas son pequeñas, peludas y zumbonas! El Día Mundial de las Abejas no es solo una excusa para hablar de miel, sino una oportunidad para poner el foco en uno de los pilares invisibles que sostiene nuestra alimentación y biodiversidad.
Aunque a veces pasen desapercibidas, las abejas hacen mucho más que volar de flor en flor: son auténticas arquitectas del equilibrio natural. En esta nota te contamos por qué se celebra esta fecha, qué amenazas enfrentan y cómo puedes sumarte a su protección. ¡Spoiler: todos podemos ayudar, incluso desde casa!
¿Por qué se celebra el 20 de mayo?
Cada 20 de mayo se conmemora el Día Mundial de las Abejas, una fecha establecida por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2017 para reconocer el papel esencial que desempeñan las abejas y otros polinizadores en la salud del planeta y la seguridad alimentaria global.
La elección de esta fecha rinde homenaje al nacimiento de Anton Janša (1734–1773), pionero de la apicultura moderna y originario de Eslovenia. Janša fue uno de los primeros en reconocer la inteligencia y el valor de las abejas, y su legado ha sido fundamental para el desarrollo de prácticas apícolas sostenibles.
¿Por qué son tan importantes las abejas?
Las abejas son responsables de polinizar más del 75% de los cultivos alimentarios del mundo, incluyendo frutas, verduras, frutos secos y aceites vegetales. Sin ellas, la biodiversidad y los ecosistemas colapsarían, desencadenando un “apocalipsis silencioso”.
Amenazas que enfrentan
Las abejas y otros polinizadores enfrentan múltiples amenazas, entre las que se incluyen:
- Pérdida de hábitat debido a la urbanización y la agricultura intensiva.
- Uso indiscriminado de pesticidas y productos químicos.
- Cambio climático que altera sus ciclos de vida y disponibilidad de flores.
- Enfermedades y parásitos que afectan a las colonias.
Estas amenazas han llevado a una disminución significativa en las poblaciones de abejas a nivel mundial.

¿Cómo podemos ayudar a su preservación?
Proteger a las abejas es una responsabilidad compartida. Algunas acciones que podemos tomar incluyen:
- Plantar flores nativas y evitar el uso de pesticidas en jardines.
- Apoyar la apicultura local y consumir miel de productores cercanos.
- Fomentar prácticas agrícolas sostenibles y respetuosas con los polinizadores.
- Participar en programas de educación y concienciación sobre la importancia de las abejas.
Cada pequeño gesto cuenta para asegurar la supervivencia de estos vitales insectos y, por ende, la nuestra.
Datos curiosos sobre las abejas
Tienen un “GPS” natural para orientarse
Las abejas poseen una asombrosa capacidad de navegación. Utilizan el sol como brújula, detectan patrones del paisaje y cuentan con una especie de “mapa mental” que les permite regresar a su colmena tras recorrer varios kilómetros en busca de néctar. Además, pueden reconocer puntos de referencia visuales y olores específicos.
Se comunican con una danza
Una de las formas más curiosas que tienen de comunicarse es mediante la llamada “danza del meneo” o waggle dance. A través de movimientos precisos en forma de ocho, una abeja exploradora le indica a sus compañeras la dirección, distancia y calidad de una fuente de alimento. Este lenguaje corporal fue descifrado por el premio Nobel Karl von Frisch.
Una colmena funciona como un superorganismo
En una colmena bien organizada, cada abeja tiene un rol específico: las obreras cuidan las crías, construyen panales y recolectan alimento; los zánganos solo existen para fecundar a la reina; y esta última es la única hembra fértil, capaz de poner hasta 2 mil huevos al día. Juntas, las abejas actúan como un solo ente que regula su temperatura interna, se defiende y se alimenta colectivamente.

Producen más miel de la que necesitan
Una sola abeja produce solo una doceava parte de una cucharadita de miel en toda su vida, pero al trabajar en conjunto, una colmena puede generar entre 20 y 30 kilos de miel al año, mucho más de lo que necesita para sobrevivir el invierno. Es este excedente el que los apicultores recolectan de manera responsable.
Tienen buena memoria y pueden aprender
Estudios recientes han demostrado que las abejas pueden reconocer rostros humanos, asociar colores con recompensas e incluso resolver problemas simples. A pesar de su diminuto cerebro, su capacidad de aprendizaje y memoria ha asombrado a la comunidad científica.
Existen más de 20 mil especies de abejas
Aunque la abeja de la miel (Apis mellifera) es la más conocida, existen miles de especies de abejas en el mundo, muchas de ellas solitarias y sin aguijón. Algunas viven en el suelo, otras en tallos de plantas, y cada una tiene adaptaciones específicas a su entorno.
Están en peligro
A pesar de su importancia para la polinización y la producción de alimentos, las abejas enfrentan múltiples amenazas: pesticidas, pérdida de hábitat, enfermedades, cambio climático y prácticas agrícolas intensivas. Su declive es una llamada de alerta para repensar nuestra relación con el medio ambiente.
Ahora que ya sabes todo esto sobre las abejas, es momento de tomar conciencia y ciudad a uno de los seres vivos más importante del planeta. Recuerda que las pequeñas acciones, hacen la diferencia.