Opinión

Sol capitalino

El domingo 21 de enero de 2024, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) publicó un comunicado en el que la cabeza leía: El PRD elige a Xóchitl Gálvez como su candidata a la Presidencia de la República con todo el respaldo perredista. Este hecho ya sabíamos que iba a ocurrir, sin embargo, donde está lo interesante del comunicado, es en los últimos dos párrafos en los que se da a conocer a los candidatos perredistas a distintos puestos de elección popular.

No sorprende que en la sesión del X Consejo Nacional se determinó que el presidente nacional del Sol Azteca, Jesús Zambrano, encabezará la Primera Fórmula del Senado por la vía Plurinominal; mientras que la secretaria general, Adriana Díaz, será la Segunda Fórmula y Julio Yáñez la Tercera. El Representante ante el Consejo General del INE, Ángel Ávila Romero, será el candidato a Diputado Federal; mientras que la activista por los Derechos de las Mujeres, Alessandra Rojo de la Vega, será la candidata al Senado en la Ciudad de México por el PRD y la Coalición. Aquí nos vamos a detener.

Xóchitl Gálvez y Jesús Zambrano

Xóchitl Gálvez y Jesús Zambrano

PRD

Este nombramiento es particularmente interesante por dos motivos. UNO, porque la primera fórmula del Senado le corresponde al PRI y la segunda al PRD; el tricolor anotó a la diputada federal Cynthia López Castro y el Sol Azteca a Rojo de la Vega, por ende, hay dos mujeres de manera continua. A ciertos personajes les llama la atención porque piensan que debido a la “equidad de género” el PRD tendría que haber nombrado a un hombre en esa fórmula, sin embargo, les recuerdo que la paridad es un mínimo, es piso, no techo. DOS, porque a Rojo de la Vega se le relaciona muchísimo más con el Partido Acción Nacional que con el PRD, por lo tanto, muchos perredistas se enojaron, entre ellos Luis Espinoza Cházaro, un perredista de sepa. No ha sido un buen año para el perredista ya que buscó encabezar a la oposición en la CDMX, pero la candidatura a la jefatura de gobierno se la dieron a Santiago Taboada. Cházaro sabía que no ganaría, pero utilizaría esa fuerza para buscar un escaño o un curul, hecho que tampoco sucedió porque dicen que el perredista se quiso saltar al presidente Zambrano al buscar un lugar en el Senado directamente en el Partido Revolucionario Institucional. Imagínense el coraje que le tendrá Cházaro a Rojo de la Vega.

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Alessandra es un perfil muy fuerte, una mujer entrona e inteligente, pero con varios enemigos. La activista feminista, mamá, y empresaria lo que buscaba era la Alcaldía Cuauhtémoc, pero la bloquearon y ahí ayudó mucho la fuerza de Xóchitl Gálvez, precandidata del PAN, PRI y PRD a la Presidencia de la República, quien abogó para que tuviera un lugar en la Cámara Alta. Le dieron la candidatura a una mujer muy capaz, pero que no es perredista. Tal vez si Victor Hugo Lobo hubiera aguantado tantito más en el PRD, le hubiera tocado la candidatura. Pero ya está disfrutando de las bondades de Morena. En tanto, ¿dónde está la presidenta del PRD en la CDMX, Nora Arias? ¿Qué le tocará? ¿Logrará mantener el registro del PRD en la Ciudad de México? Lo veremos.

El sol pareciera que empieza a bajar en la capital del país.

Por cierto:

BATALLA. Los priistas serán los encargados de poner a la candidata en la Alcaldía Cuauhtémoc. Están entre dos diputadas locales: Maxta González o Silvia Sánchez Barrios. Una tiene el apoyo de los comerciantes y la otra el del ciudadano de a pie. ¿Qué favorecerá más el partido?

QUE ESPERAN. Que en el PAN-CDMX no hay definiciones internas y ya están contrarreloj. Desde afuera, uno esperaría que se prioricen las trayectorias y el trabajo territorial, si es que quieren competirle al partido oficial en 2024 pues las cosas no van a estar nada fáciles. Apostarle a la experiencia y a perfiles jóvenes y mediáticos ante la escasez de buenos cuadros, no sería mala idea.

Vivo la noticia, para contarle la historia

@juanmapregunta