
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) “no cede ante la agresión injustificada ni la descalificación”, dijo su rector, Leonardo Lomelí Vanegas, durante la investidura del Doctorado Honoris Causa 2025 a 14 personalidades nacionales y extranjeras destacadas de la ciencia, la cultura y las humanidades.
Desde el majestuoso Palacio de Minería, dijo que la autonomía “no es un privilegio, sino el rigor que permite servir con libertad a la nación”, y llamó a defender los espacios donde se piensa con independencia y se imagina un futuro justo.
Lomelí Vanegas dijo que la ceremonia se convierte en un gesto de conciencia y profunda gratitud institucional a quienes han sobresalido por sus méritos excepcionales y contribuciones sobresalientes al desarrollo de las ciencias, humanidades, el arte y la cultura en México y el mundo.
“Las trayectorias reconocidas ensanchan el horizonte de lo que implica pensar, enseñar, cuidar y defender la dignidad humana”, expresó.
El rector resaltó que la sesión solemne “no es una pausa en medio de la adversidad, sino una respuesta clara ante ella; frente a las turbulencias y la incertidumbre, la UNAM divulga las obras que generan conocimiento aplicado e impulsan la esperanza”.
Ante ex rectores y la investida ex presidente de Chile, Michelle Bachellet, defendió la educación pública y la autonomía de la UNAM, que ayuda a resolver acuciantes problemas mediante una hoja de ruta clara, consensuada y con autodeterminación.
Otras figuras notables reconocidas fueron el neurocientífico Rafael Yuste, la lingüista Una Canger, quien habló a nombre de los reconocidos; Julio Frenk Mora, Dag Hanstorp, Antonio María Hernández, María Emilia Lucio y Gómez Maqueo, Alejandro Portes y Dani Rodrik, economista impulsor del neoliberalismo con justicia social; y los Premio Crónica: Estela Susana Lizano Soberón, Susana López Charretón y José Sarukhán Kermez, entre otros.
Los Premio Crónica <b>Estela Susana Lizano Soberón</b>, <b>Susana López Charretón y José Sarukhán Kermez, entre los distinguidos con el Doctorado Honoris causa</b>

AUTONOMÍA UNAM, RIGOR, NO PRIVILEGIO
El rector Lomelí Vanegas dedicó una parte fundamental de su discurso a la defensa institucional universitaria en tiempos desafiantes.
Afirmó que “honrar el saber implica también proteger las instancias y las condiciones en donde este florece; por estos factores, ninguna forma de violencia o discriminación tiene cabida en la institución”.
Añadió que la naturaleza de la Autonomía Universitaria, es a menudo un concepto malentendido; “nuestra autonomía no es aislamiento ni un privilegio, más bien es un atributo que nos permite servir con libertad y rigor” a la nación”.
Dijo que la UNAM siempre defenderá la pluralidad de ideas, el intercambio libre de posturas y el cumplimiento de la ley.
El rector explicó que, desde las diferencias, la Universidad “no cede ante la agresión injustificada ni la descalificación; la institución es un espacio de encuentro, un mosaico de miradas y un crisol de perspectivas, que son patrimonio de México”.
DEFENSA DE EDUCACIÓN PÚBLICA Y COLABORACIÓN INTERSECTORIAL
El discurso del Dr. Lomelí Vanegas durante la ceremonia del Doctorado Honoris Causa fue escuchado por una extensa y distinguida audiencia, tanto del claustro académico universitario, como invitados especiales, amenizados por la Orquesta Juvenil Universitaria, que interpretó magistralmente el himno de la UNAM, en los intervalos del magno evento de casi dos horas.
Las palabras del rector resaltaron el valor de la educación pública en México; “un derecho irrenunciable como un proyecto común en permanente evolución, fruto de luchas y conquistas sociales que han dejado una huella profunda en varias generaciones”.
Resaltó que el conocimiento es expandido cuando son formalizadas alianzas estratégicas, las cuales “deben darse entre las instituciones educativas, el Estado y el sector privado; el diálogo y la cooperación potencian la investigación y amplían el alcance social de la academia”.
Dijo que la Universidad debe seguir siendo el motor de desarrollo y equidad social para el país: “la UNAM valora el intercambio con instituciones de todo el mundo, reivindicando la colaboración académica internacional”.
Enseguida reconoció que las contribuciones de múltiples exilios y migraciones beneficiaron a la Universidad, y afirmó que el compromiso fundamental de la UNAM es abrir caminos distintos y transformar realidades.
Señaló que el objetivo universitario es multiplicar las posibilidades de una vida digna para la ciudadanía y por ello la institución seguirá orientando su empeño en la defensa de los recintos donde se piensa con libertad y se imagina un futuro justo.
“La autoridad moral de la UNAM no se impone, se teje cada día con hechos, con transparencia y con resultados", expresó.
Lomelí Vanegas reiteró la vocación humanista univrsiaria en la defensa de los recintos de conocimiento.
Dijo que la Investidura Honoris Causa UNAM es la manifestación visible del compromiso perenne con el progreso académico y el servicio a la sociedad.
RAZÓN, PEDAGOGÍA Y PROGRESO SOCIAL
El rector de la UNAM señaló que los nuevos integrantes del Doctorado Honoris Causa UNAM representan el diálogo fecundo y necesario entre las humanidades, la ciencia y la cultura.
Afirmó que sus aportaciones confirman que la racionalidad aporta la certeza necesaria para actuar, sin limitarse solo a interpretar.
Entre los galardonados se encontraban figuras clave en el pensamiento social, la lucha por la justicia y la salud.
Fue reconocido Dani Rodrick, quien sostiene que los mercados necesitan instituciones democráticas sólidas para generar prosperidad.
También fue distinguida la expresidente de Chile, Michelle Bachelet, por su liderazgo con empatía y su trabajo en derechos humanos y multilateralismo.
El sociólogo Alejandro Portes fue honrado por demostrar que la migración fortalece economías y articula redes transnacionales.
En el ámbito de la ciencia y la salud, la UNAM distinguió a Susana López Charretón por su trabajo esencial con el rotavirus.
Julio Frank Mora fue reconocido como arquitecto de políticas públicas que evidencian la necesidad de instituciones robustas en salud.
Rafael Yuste, neurocientífico, recibió el honor por su firme compromiso ético con la defensa de los neuroderechos.
El exrector José Sarukhán Kermez, fundador de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), fue destacado por elevar la biodiversidad a política de Estado.
Una Canger, lingüista danesa, fue honrada por su incesante labor como guardiana y difusora del náhuatl; “ellas y ellos encarnan los valores universales de la UNAM; razón, pedagogía, solidaridad, igualdad e integridad”, explicó el Lomelí Vanegas.