
México acumuló “un déficit” de políticas públicas “que afectó sensiblemente los resultados de lo social”, en gran medida porque carece de una “política de justicia” desde la conformación de su constitución política en 1917, estimó Diego Valadés, miembro de El Colegio Nacional, al participar en la presentación del libro Coordenadas para pensar lo social, del economista Mario Luis Fuentes.
“Mario Luis Fuentes —señaló el colegiado— dice que en México ha fallado la economía, pero que ha fallado fundamentalmente por la política, y lo mismo podría decirse de otros aspectos, como uno que está ahora discutiéndose de manera amplia: la justicia. La justicia ha fallado porque ha fallado la política de justicia, el Estado mexicano ha carecido de política de justicia desde 1917”.
“Nuestra Constitución marcó muchos puntos de avanzada, particularmente en lo social, pero relegó lo que concierne a la justicia, lo que atañía estrictamente a los tribunales y no asumió el Estado mismo como una de sus responsabilidades, la de definir la gran política de justicia que debía acompañar la gran política social del país y ahí nos encontramos con un déficit que afectó sensiblemente en los resultados de lo social”, enfatizó Valadés.
Desde el Auditorio Jesús Silva Herzog, en el Posgrado de la Facultad de Economía de la UNAM, el colegiado coordinó la presentación del libro, donde también participó Lorena Rodríguez León, directora de la Facultad de Economía de la UNAM, el economista y profesor emérito de la UNAM, Rolando Cordera Campos, así como el autor del volumen.
Valadés celebró la organización compartida del acto, entre la Facultad de Economía y El Colegio Nacional: “A partir de esta mesa, estoy seguro, se generará como interés, en múltiples sectores del mundo académico y en general de la vida social mexicana, acerca de lo que se nos propone en una obra que a mí me llamó poderosamente la atención”.
Paradójicamente, agregó, “el diálogo, el debate, el ejercicio enriquecedor del contraste de ideas en términos propositivos, constructivos, ha tendido a escasear recientemente en nuestro país, si bien no en nuestros ámbitos académicos, pero un tema como este debe ser debatido en este espacio de libertades y de creatividad que es el ámbito académico, el que propicia la Universidad Nacional Autónoma de México y el que también cultiva El Colegio Nacional. Es esencialmente una misión que debemos trasladar al resto de la sociedad mexicana”.
Coordenadas para pensar lo social, explicó el autor, Mario Luis Fuentes, nace de la indignación ante la situación que vive México y el mundo: “Yo trato de explicar lo social desde la historia, desde la tradición y el lenguaje. No hay noción de lo social o del humano, sino damos cuenta de una posición, la posición es que todos somos seres históricos, seres políticos, seres sociales y que el lenguaje es un instrumento”.
El texto, señaló, tiene un enorme impulso: “Es mi azoro ante el dolor, es mi azoro ante la violencia, es mi azoro ante lo que dice un texto de David Huerta, ahí me tengo que retraer para tratar de dar cuenta de por qué me azoro y por qué esta búsqueda de coordenadas para pensar”.
Fuentes leyó los versos de Huerta de su poema “Ayotzinapa”: “Mordemos la sombra / Y en la sombra aparecen los muertos / Como luces y frutos / Como vasos de sangre / Como piedras de abismo / Como ramas y frondas / de dulces vísceras / Los muertos tienen manos / Empapadas de angustia / Y gestos inclinados / Los muertos llevan consigo / un dolor insaciable”.
Para Mario Luis Fuentes, “esto es lo social. Esto es donde yo me paro y me sostengo y me pregunto, ¿tengo la audacia de plantearlo? Hay que pensar lo social desde esta tesitura del dolor, de dar cuenta de la enorme realidad de que somos un país de fosas, un país de desaparecidos, un país de enorme violencia y violaciones y por eso mi enorme azoro y hasta señalamiento cuando hacemos una visión social que se desprende de esto”.
Enseguida, Fuentes hizo un reclamo: “Desde mi punto de vista cualquier actividad académica universitaria de la UNAM debe tener una actitud de transformar la realidad social. No es simplemente observarla, describirla, es transformar —lo que yo llamo en el texto— una percepción de una profunda injusticia que tiene clave de dolor”.
Vigencia del análisis social
El momento de “turbulencia social” que vive el mundo, señaló Lorena Rodríguez León, directora de la Facultad de Economía de la UNAM, vuelve pertinente el libro de Mario Luis Fuentes: “Una de las primeras virtudes de este texto es que se suma a los esfuerzos internacionales por ampliar la memoria colectiva en torno a la cuestión social. Es decir, es una contribución original al intercambio cultural e intelectual de la humanidad acerca de lo social”.
“Esta obra es resultado de un largo proceso de reflexión de varios años de Mario Luis, el cual ha estado motivado por una realidad que lastima profundamente a todo aquel que se atreve a mirar con atención en todas sus esquinas, donde una creciente población enfrenta condiciones de vida indignas y los mercados realizan incorrectamente su función, ampliando las brechas de desigualdad”, señaló la economista.
Con su libro, agregó, “el autor busca ofrecernos coordenadas para pensar la complejidad que caracteriza lo social del siglo XXI o como él mismo dice, ‘para pensar nuestro estar y nuestro ser en el mundo actual’. Con este propósito, la obra retoma el legado de grandes autores internacionales, construidos durante varias décadas, sirviendo esto de base para elaborar una interpretación original que busca plantear un cambio de rumbo más equitativo y justo para la sociedad”.
“El primer reto para hablar hoy día de lo social, nos dice Mario Luis, es identificar la existencia de una cuestión social distinta a la que se configuró en el siglo XX y en consecuencia de las nuevas responsabilidades del Estado. Para resolver este entresijo es necesario reconocer de dónde viene la necesidad de reflexionar lo social en el siglo XXI. La cuestión social en el presente se encuentra atravesada por lo que diversos autores han llamado una policrisis”, explicó.
Al hablar de la crisis de 2008-2009 que vivió el mundo, Rolando Cordera Campos recordó los cuestionamientos que la ya fallecida reina Isabel II hizo a los economistas sobre plantear soluciones para evitar la recesión: “El mundo pudo evitar una catástrofe económica como la que teníamos, de nuevo poniendo en práctica lo que del gran economista del siglo XX, John Maynard Keynes, habían aprendido y convertido en fórmulas teóricas y de trabajo y que era que el capitalismo, por sí mismo, no podía asegurar su reproducción y su vuelta de equilibrio”.
En consecuencia, agregó “se necesita de la mano nada oculta del Estado para salir adelante de esos embrollos y retomar las dinámicas y potencialidades de aquel capitalismo que en el siglo XIX había transformado las sociedades avanzadas y que, sin embargo, en aquel siglo XIX, no había sido capaz de incorporar a buena parte de la población que en aquellos años quedaba desplazada o no estaba integrada a las nuevas potencialidades de la gran maquinaria económica que se forjaba”.
Esa no integración, llevó a hablar de justicia social. Pero Cordera cuestionó las facultades del Estado para “redefinir la cuestión social en el siglo XXI y poder enfrentarla con eficacia para bienestar de todos, enfrentando algunas de las cuestiones cruciales que forman la cuestión social de hoy y poder pasar a un sistema político, a un sistema nacional de cuidados, por ejemplo”.
En el caso mexicano, concluyó, “tendríamos que decir y poder enfrentar lo que es ya, evidentemente, al menos para mí, la tragedia educativa de este país”. La presentación del libro Coordenadas para pensar lo social, de Mario Luis Fuentes, se encuentra disponible en el Canal de YouTube de la institución: elcolegionacionalmx.