La catedral de la ciudad italiana de Siena (norte) ha comenzado este miércoles el ritual para descubrir su pavimento de mármol, que permanece cubierto la mayor parte del año para su conservación, y que por primera vez muestra un mosaico dedicado a la Esperanza, oculto desde que fue diseñado en 1870.
La pieza, desvelada con motivo del Jubileo de la Esperanza de 2025, forma parte de los 56 paneles de mármol policromado, decorados con losas de piedra, mosaicos y escenas bíblicas que conforman el pavimento, que está considerado una de las joyas del patrimonio artístico italiano.
Este conjunto único narra quinientos años de historia artística, cultural y religiosa de la ciudad, a través de composiciones de autores sieneses como Domenico Beccafumi, Matteo di Giovanni o Sassetta, así como del Pinturicchio, originario de la región de Umbría (centro de Italia).Los trabajos para levantar la lona comenzaron este miércoles, en el marco de un ritual que descubre las composiciones de forma extraordinaria algunos meses, una operación delicada que se repite anualmente.
Este año, con motivo del Jubileo Ordinario convocado por el difunto papa Francisco y dedicado a la Esperanza, se exhibe por primera vez un mosaico dedicado a esta virtud, diseñado en 1870 por Alessandro Franchi y realizado por los artistas Leopoldo Maccari y Giuseppe y Antonio Radichi.
Hasta ahora, ‘La Esperanza’ permanecía oculta incluso durante las aperturas anuales del pavimento, ya que está ubicada junto a la capilla de la Virgen del Voto, proyectada por Gian Lorenzo Bernini por encargo del papa Alejandro VII, y lugar de peregrinación para miles de fieles que acuden a venerar su imagen.
“La figura refleja la iconografía típica, que prevé el gesto de las manos unidas al pecho, la mirada dirigida hacia lo alto y el significativo atributo del ancla de salvación, a la cual “anclar” las esperanzas de la humanidad", explicó en una nota la Obra de la Catedral de Siena, organismo encargado de la tutela y gestión del templo.
El recorrido por el pavimento comienza en la puerta lateral derecha del templo, donde se conserva una inscripción del primer Jubileo cristiano, celebrado en el año 1300 y lleva al visitante por las 56 imágenes del pavimento, realizadas entre los siglos XIV y XIX.
“Siguiendo el llamamiento del papa León XIV a ser “peregrinos de la esperanza”, miles de visitantes que recorren la Vía Francígena están invitados a caminar por este suelo único, descubriendo paso a paso un mensaje espiritual y atemporal en el corazón de una de las catedrales más emblemáticas del mundo", añadió la organización.
El suelo, que se encuentra cubierto con una tela durante la mayor parte del año para su conservación, podrá visitarse del 27 de junio al 31 de julio y, tras una pausa, entre el 18 de agosto y el 15 de octubre.