Cultura

Javier Garciadiego: “La difusión de la historia ha sido un privilegio”

Celebra los 20 años de su programa “Historia para todos” con amigos, colegas y especialmente, con sus radioescuchas

festejo

Soy un hombre muy beneficiado por este Estado mexicano que surgió después de la Revolución, dice Javier Garciadiego.

Soy un hombre muy beneficiado por este Estado mexicano que surgió después de la Revolución, dice Javier Garciadiego.

Adrián Contreras

“Para mí, la difusión de la historia ha sido un privilegio”, dice Javier Garciadiego Dantán casi al finalizar la edición especial para celebrar los 20 años al aire de su programa “Historia para todos”, que se transmite por Instituto Mexicano de la Radio.

Pero el verdadero privilegio fue estar en esa fiesta en el salón del IMER y que duró una hora. En esos 60 minutos se reunieron tres o cuatro decenas de personas, entre amigos, colegas y mayormente lo sustancial: los radioescuchas para oír el programa especial dividido en dos secciones: la primera sobre el fin del Partido Nacional Revolucionario - activo entre 1929 y 1938- y la segunda, una charla con su público y colaboradores.

Y así Javier Garciadiego, Premio Crónica, destacó que el fin del PNR no se puede simplificar a que fue el papá del Partido de la Revolución Mexicana (PRM), sino que hubo otros factores que lo determinaron, entre ellos que las organizaciones sociales reclamaban poder estar dentro del partido.

La segunda parte fue un recuento de cómo llegó al programa en mayo de 2004. “El historiador Gastón García Cantú llevaba el programa y lo conducía Sabrina, pero a su muerte me invitaron a ser el conductor y en los primeros programas sólo recibíamos rechazos y llamadas pidiendo que regresará don Gastón”.

No lo podía hacer, porqué él había muerto un mes antes, en abril de 2004, recuerda Javier Garciadiego. “Si alguien lo extrañaba era yo, porque había sido mi director de tesis y probablemente dio mi nombre a las autoridades del IMER. Fue difícil, pero poco a poco nos fuimos consolidando. En ese tiempo tuvo el programa el nombre de “Conversaciones sobre Historia”.

Aleida Calleja Gutiérrez, directora del IMER, le entregó un reconocimiento a Javier Garciadiego

Después cambió su nombre y hasta antes de la pandemia por coronavirus, añade, era un programa en vivo y las compañeras recibían las llamadas telefónicas con preguntas, recomendaciones, críticas y las escribían en uno papeles que me pasaban. “Producto de esto se creó la cápsula de mitad de programa, que muchos años la llevó Pedro Salmerón. Era un tiempo que servía para redactar las respuestas a estas preguntas o comentarios. Habían pasado los tiempos de los reclamos que enviaban las personas en las primeras semanas después de la muerte de don Gastón”.

Para superar esto de los reclamos, Javier Garciadiego hace una digresión y recuerda: “Lo que hicimos fue sembrar algunas preguntas, como cuál era el segundo apellido de Álvaro Obregón. Con el tiempo, la gente se comenzó a animar y enviaron sus preguntas”.

Durante este tiempo, en algunos programas se tuvieron hasta 250 llamadas recibidas en la hora que duraba y eran atendidas por cinco personas en los teléfonos.

SIN EXPERIENCIA

Javier Garciadiego cuenta que no tenía alguna experiencia en la radio y pasó algo importante: “Inmediatamente me enamoré del micrófono”. Entonces, para hacer el programa, tomé varias decisiones: Una, fue por la experiencia en la docencia. “No dar muchos datos ni dar muchos nombres en cada emisión, porque la gente está trasladándose al trabajo o ya lo está o está haciendo ejercicio. Era dar información, pero nada que obligue a tener un cuaderno y lápiz”.

El segundo punto, explica, fue repetir la idea central dos o tres veces, “como lo hice con el PNR ya sin Plutarco Elías Calles”. El tercer punto, añade, es iniciar la nueva edición recordando lo que se dijo en la anterior y además “decidí que el programa debía tener una estructura, un orden cronológico y una etapa precisa de la historia. Entonces, establecí desde finales del Porfiriato hasta mediados del siglo XX”.

Javier Garciadiego con algunos de sus radioescuchas.

Javier Garciadiego con algunos de sus radioescuchas.

Adrián Contreras

Otro de los puntos, indica, fue no poner trivialidades. “No tener un recetario de anécdotas. Por ejemplo, historia sexual de los personajes, pues si es una dinastía interesa, pero si no lo es, por qué debería interesar. Hablar de la vida cotidiana, es decir, si a Calles le gustaba desayunar papaya o melón, no es importante a menos que hubiera sido envenenado. También decidí no usar un lenguaje dominguero, sino el que pudieran entender todos y no sólo hablar de los grandes protagonistas, sino de los participantes en global, es decir, sin exclusiones”.

Y en siempre, explica, tuve la idea de que debía haber otros programas, con otros responsables que hablaran de otros temas, como el periodo prehispánico.

MEJOR MÉXICO

Antes de terminar su programa y agradecer a todos los que le han ayudado, Javier Garciadiego dijo que “está convencido de que este país va a mejorar cuando tenga mejores ciudadanos, conscientes, politizados, informados, disciplinados…, pero la información histórica es también un ingrediente inapreciable y, para ser un buen ciudadano debes tener, no ser un experto en historia, las bases de la disciplina.

Pero también fue un tiempo para agradecer y señaló: “He sido un hombre, la verdad, muy beneficiado por este Estado mexicano que surgió después de la Revolución. Yo me eduqué en la UNAM y El Colegio de México, ambas instituciones públicas, luego obtuve una beca de Conacyt que me llevó a Chicago para estudiar con Friedrich Katz. Regresé y básicamente mi vida académica la he pasado en El Colegio de México y la UNAM”.

De la docencia en el Colegio de México dijo que tiene grupos de 10, 12 o 15 alumnos que va a ser muy buenos, pero asegura que para él, desde hace 20 años, es más importante la difusión de la historia. “Hoy no comparo el interés y el cariño que le pongo a la difusión de la historia, que son cientos de miles escuchas, a los 15 o 20 alumnos que pueda tener. “Bueno, creo que he logrado tener las dos cosas, pero para mi la difusión de la historia ha sido un privilegio y por eso agradezco a mi equipo y a las autoridades que me permiten tener el programa”.