Escenario

‘(Esc)afandra’ en el Teatro de las Artes del CENART: Un viaje a las profundidades

ENTREVISTA. Patricia Marín comparte detalles de la puesta en escena que llega este fin de semana a la CDMX y que codirige con Leonardo Beltrán y Rogelio Marín

teatro

Imagen de la obra.

Imagen de la obra.

Cortesía

Por medio de una entrevista, Patricia Marín presentó los detalles de la nueva puesta en escena que codirige y produce de la mano de Leonardo Beltrán y Rogelio Marín: (Esc)afandra, un viaje teatral por la Fosa de las Marianas para los más pequeños de los hogares mexicanos, que se presentará en el Teatro de las Artes del CENART el sábado 3 y domingo 4 de febrero a las 14:00 horas y el sábado 10 y 11 del mismo mes con funciones dobles a las 12:00 y 14:00 horas. Los boletos pueden adquirirse a través de la plataforma virtual del CENART o directamente en la taquilla.

Recuerdo que empezamos a platicar sobre los límites que tenía el ser humano, y de eso era el proyecto, Leonardo tenía que hacer una instalación para la maestría. Entonces, le dije, ¿por qué no grabamos en un audio cuánto tiempo puede estar un hombre en el agua?”, mencionó Patricia sobre el nacimiento de la idea que sirvió como pilar de esta nueva iniciativa de la compañía Danza Visual.

Patricia anotó que para llegar hasta la profundidad del agua, tuvieron que empezar a: “Hablar sobre los límites. Leonardo hizo un texto al principio, el hermanito menor de Escafandra, que se llamaba Batiscafo, sobre un aparato biomecánico que trataba de entender las relaciones desde otra perspectiva, pero lo fuimos transformando a un diálogo con seres que no tienen contacto con el sol y desarrollan bioluminiscencia”, dijo.

Para los creadores, de acuerdo con Marín, era importante juntar los elementos correctos para crear “metáforas con la limitación de la luz”, que después se hicieron tangibles con el desarrollo de una botarga que impedía ver al actor. Así, los personajes “cayeron donde tenían que caer” para construir una historia sobre los prejuicios y el miedo a lo desconocido.

Lee también

‘Leyendas, el show’, un musical para celebrar la balada romántica en español

Carlos Olivares
Imagen de ‘Leyendas, el show’.

A pesar de la poca información que se tiene sobre los habitantes y las condiciones de los puntos más profundos de la fosa, Patricia y el equipo creativo se basaron en algunas historias de Julio Verne, en particular, el libro favorito de Leonardo, Un capitán de quince años, para abordar las diversidades funcionales en las infancias de todo el planeta.

Para llevar a cabo esta tarea, se acercaron a Diana Fernández, maestra especialista en danza terapéutica, quien ha trabajado con infancias diversas desde hace más de 16 años y ha trabajado con el equipo de Danza Visual con temas de sensibilización para lograr una puesta en escena infantil mucho más sincera y cercana a las vidas de las personas con discapacidad.

Interactuar con Diana, según comenta Marín, ha “cambiado la perspectiva de la compañía acerca de la discriminación y la forma en la que contribuimos a erradicar estas acciones con los públicos.” Marín recordó los primeros intentos de hacer teatro incorporando elementos de la Lengua de Señas Mexicana, que fueron “catastróficos”, pero mejoraron con el estudio y aprendizaje de nuevas maneras de comunicarse con su público.

Danza Visual también cuenta con el apoyo de Hugo Ramírez, quien “causalmente” estudió con Diana desde que tenía ocho años y ahora es parte del cuerpo actoral de (Esc)afandra y ayuda a escalar las barreras del habla y la comunicación. “Más allá de generar un producto visualmente bello, aclaró Patricia, hay todo un imaginario onírico para recrear las profundidades, que nos llevó a crear un piso de vidrio para reflejar a los intérpretes y reforzar la metáfora de la procedencia de la luz”, destacó.

Lee también

Adrián Vázquez destaca la labor de teatro de investigación de la compañía Los Tres Tristes Tigres

Montserrat RM
El actor y dramaturgo Adrián Vázquez.

Los niños, desde los tres años, la pasan muy bien mientras la escafandra baila mambo, luego los subimos al escenario y nunca falta un papá que también se quiere unir y lo incluimos en la dinámica. Son semillitas que empezamos a compartir.” Además, Patricia añadió: “Buscamos que nuestros talentos también estén protegidos, que sean tratados en las condiciones correctas y tratamos de empezar a diversificar nuestras formas de colaborar, porque tenemos una compañía muy diversa: tenemos gente de teatro, de ópera, especialistas en lenguas indígenas, bailarines de folclor, de danza prehispánica, es muy vasto”, enfatizó.

Patricia solo tiene sentimientos de agradecimiento para la obra por enseñarle a no descuidar la existencia humana y hacerle entender cómo puede cambiar un poco las cosas a través del arte, que además tiene la capacidad de generar universos que “tú jamás imaginaste.” Marín espera tener la oportunidad de “por medio de este quehacer y Danza Visual, despertar la inquietud de que los niños se involucren más con el arte y volverlos adultos más sensibles a la diversidad funcional”, comentó.

Es una obra de una hora y diez minutos y los niños salen muy contentos, salen preguntándose acerca de los mares, de las artes y sobre todo, pasan un rato en familia; es muy importante fomentar el tiempo con los niños, porque dejan de ser niños muy rápido”, culminó Patricia sobre (Esc)afandra y su impacto en las familias que la ven.

El proyecto está disponible a través de redes sociales como: @danzavisual, en donde actualizan, constantemente, los avances de su dispositivo creativo y anuncian sus próximas funciones.