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La actriz Paulina Goto se pone en la piel del personaje principal de la puesta en escena, Ghost. La sombra del amor. “Como no conocer la historia que es un clásico en el mundo del cine y poder remontar ahora al teatro, me parece algo que tenía que suceder en algún momento”, declaró la actriz en entrevista con Crónica Escenario.
Goto señala que más allá de ser una historia de amor, pasión y demás, el tema que rescata es el hablar de la muerte, en otros términos, asemejándose aún más, a los tiempos de pandemia que se vivieron y en donde miles de personas perdieron la vida.
“Hubo tantas perdidas, me incluyo al haber perdido a gente amada, y esta obra es como muy sanadora y esperanzadora, yo lo pude llevar a cabo a través del personaje de Molly. Hacía mucho que no me adentraba en una propuesta musical y hacerlo con Ghost, fue como un tiempo perfecto para vivir un proceso personal que enfrentaba”, narró.
Tras la pérdida de su padre y gente querida, Goto no pudo tener mejor terapia, que ponerse en los zapatos de una persona que perdió a su pareja, aquella a quien tanto amaba, pero que, sin duda, su alma quedó en ella para siempre, recordando los buenos momentos vividos.
“Fue muy padre entender en cada escena que es lo que pasa con el personaje, ver cómo es que después de cada pérdida, se tiene que vivir un duelo, emocionalmente fue un reto el poder conectar con lo que viví. Lo he vivido como un proceso amoroso y de mucho entendimiento, cada persona se lleva algo distinto de la obra, algunos pueden verla en tono de amor, risa y aquellos que van a lo más profundo”, compartió.
La obra cuenta la historia de Sam y Molly quienes están muy enamorados. Un día Sam es asesinado y se transforma en un fantasma que deambula por las calles. Muy triste por haber dejado sola a Molly, Sam descubre que Carl, su amigo y socio corrupto, es el responsable de su muerte.
“Es una historia que resonó conmigo, y por eso no dudé en darle el sí al proyecto, estoy como en la colita de mi proceso de duelo, y no es casualidad que este personaje haya llegado a mis manos. Mi postura como actriz, es que le impregnó mi bagaje emocional y le dio mi propia manera de interpretar, le di mis ojos y mi alma”, exclamó reflexivamente.
Ghost. La sombra del amor cuenta con 40 cambios escenográficos, una sofisticada iluminación que incluyen un enorme departamento de Molly y Sam, el salón de la médium Oda Mae Brown, las calles de Nueva York, un edificio de oficinas, un hospital, un lujoso banco, la estación de metro de la calle 42 y un vagón de metro que emerge del escenario, lo que la convierte en una producción de gran tamaño.
“Lo que requiere disciplina de más, constancia y entrenamiento, además de cómo es que se desenvuelve la historia”, concluyó Goto, quien estará por alrededor de cinco semanas más, y en espera de que más adelante pueda regresar con una nueva temporada.
Las funciones de la obra se realizan los viernes con funciones a las 18:00 y 21:00 horas; sábados 17:00 y 20:00 horas; domingo 13:30 y 18:00 horas, en el Teatro San Rafael.
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