Como ya les platicamos en la entrega previa sobre esta gran banda, en el año 1980, The Cure entró con todo a la nueva década, por el lanzamiento de su segundo álbum de estudio: Seventeen Seconds; publicación que el mismo Robert Smith lo considera como realmente su primer disco, pues fue en el que logró plasmar lo que él quería lograr con su música, sin influencias de productores, managers ni ejecutivos de disqueras que al principio se le atravesaron en su camino y tomaron decisiones artísticas que, en su muy peculiar opinión, no lograron obtener el sonido que él quería para él y su banda; sin embargo, logró la confianza de su disquera y durante la vida de The Cure nunca cambiaría de disquera; la canción “A Forest”, fue su mayor éxito de este álbum.
Con esta publicación se inició la época gótica de The Cure, en la que crearon su imagen con influencias dark: ropas y maquillaje negros, además de sus largas melenas ochenteras.
En sus sonidos siguieron un camino que muy pocas bandas eligieron, lo que en español se conoce como: la onda oscura (darkwave) o como rock gótico o post punk, pero definitivamente nunca fueron parte de la onda hard rock, pues nunca incorporan guitarrazos ni requintos complejos, sino más bien atmósferas con voces de teclados y órganos que seguían un ritmo más cercano al pop, junto con largas introducciones en sus canciones como preludio a la parte cantada y con líneas de teclados y bajos muy elaboradas, manteniendo las guitarras con muchos ecos, poca distorsión y con melodías que podrían considerarse más bien muy minimalistas.
Su siguiente producción fue publicada en abril de 1981: Faith; un álbum con letras muy introspectivas y que nos muestran la lucha interna de un Robert Smith que comienza a cuestionarse su propia fe, tras haber crecido en un hogar con raíces muy católicas; nos comparte cómo desde su interior surge un claro agnosticismo que va dominando y modificando hasta sus más profundas creencias.
Durante la etapa de composición de Faith, murió la abuela de Robert y también la de Tolhurst, por lo que incorporaron como influencia todas esas conversaciones entre los integrantes que intentaban encontrarle un sentido a la vida y a la muerte. De este álbum recomendamos dos piezas: “Primary” y “Other Voices”, además de la pieza: “Charlotte Sometimes”, que se lanzó como sencillo, pero no estuvo incluida en este LP.
En 1982 llegaría su disco: Pornography; con el que completarían la que es considerada su Trilogía Gótica, o Clásica; este álbum surgió a raíz de la larga gira del anterior, por muchas razones, quizá la primera fue el suicidio de Ian Curtis, vocalista de Joy Division, muerte que afectó profundamente a Robert Smith, hasta el punto en que él mismo cuenta que en sus conciertos él sentía que o hacía otro disco o él sería el siguiente en morir.
Simon Gallup nos cuenta sobre el mood del disco: “Cantábamos: ‘no importa si todos morimos’, y en verdad así nos sentíamos, nada importaba”; la soledad y tanto tiempo viviendo de gira causó estragos, en el exceso de drogas y sexo y generando problemas entre los integrantes.
Su disquera sólo le vio potencial a la pieza: “The Hanging Gardens”, por lo que fue el único sencillo y video que hicieron. Robert cuenta que él esperaba alcanzar un mejor lugar en el Billboard, pero solo llegaron al número 8 en Reino Unido, y en los Estados Unidos nada aún.
La reflexión sobre la muerte, las discusiones internas y con su disquera llevaron a Robert a meditar la posibilidad de desaparecer a The Cure.
Cotinuará…
@jorgehhm
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