A raíz de los resultados de sus discos y sus giras, Simon Gallup tuvo una pelea con Robert Smith que desembocó en su salida de la banda, por lo que momentáneamente continuaron sólo como dúo.
Aún así, Chris Parry, el dueño de Fiction Records y quien le había dado una confianza total a Robert, de nuevo jugó un papel decisivo; fue el primero que dijo que era momento de romper con ese estilo tan oscuro, que la crítica definía como: “encerrado en el malestar terminal del existencialismo adolescente”, y también se dijo que: “Robert suena como atrapado en una pesadilla en espiral que hace sonar a la música de The Cure como demasiado pomposa”.
Aunque en retrospectiva este álbum fue el top de toda la historia del rock gótico, la crítica llevó a The Cure a tomar una decisión que Robert tomó como juego: cambiar a un estilo más pop. Él mismo nos cuenta que aceptó únicamente porque a final de cuentas él veía que The Cure se estaba muriendo y este cambio era únicamente el tiro de gracia.
Pero nada más alejado de la realidad, pues al final de 1982, Robert se decidió a: “romper el carácter sombrío de los primeros discos de The Cure”, por lo que grabaron entonces un primer tema: “Let’s Go to Bed”, mucho más jovial y con sonidos electrónicos. En los inicios de 1983, lo siguieron dos sencillos más: “The Walk” y “The Lovecats”, este último un tema con ritmo de jazz basado en la película: Los Aristogatos. Los apoyó Steve Goulding en la batería y “Lol” Tolhurst decidió quedarse en los teclados.
De manera inesperada estos tres sencillos tuvieron más éxito, por lo que se decidieron a lanzarlos en un álbum que incluyera estas tres piezas más sus correspondientes lados B, publicado bajo el nombre de: Japanese Whispers.
Robert decidió tomar un respiro y formó el súper grupo The Glove, junto con el bajista de Siouxsie & The Banshees, Steven Severin; editaron un álbum de estilo pop psicodélico de nombre: Blue Sunshine, pero esta agrupación casi de inmediato se disolvió.
De vuelta en la realidad, Robert Smith decidió relanzar a The Cure, por lo que invitó a su viejo amigo “Porl” Thompson a tomar la segunda guitarra, a Phil Tornalley al bajo, a Andy Anderson a la batería y mantuvo a Tolhurst en los teclados.
Con esta nueva alineación, y ya con canciones compuestas por el dúo Smith/Tolhurst, grabaron lo que sería: The Top, publicado en 1984. Resalta la pieza: “The Caterpillar” y alcanzó un discreto número 10 en Reino Unido.
En la gira de este álbum sufrieron cambios de alineaciones, primero en la batería que tomó Boris Williams, ex Thompson Twins, y después en el bajo, pues Simon Gallup se reconcilió con Robert, y con esta nueva alineación, de inmediato iniciaron las grabaciones de su siguiente disco.
The Head on The Door, su trabajo publicado en 1985, fue simplemente un éxito, considerado uno de los álbumes más poderosos del rock de todos los tiempos y álbum número 2 de 1985 en Reino Unido; obtuvo varios discos de oro por sus ventas.
Las piezas preferidas por el gran público fueron: “In Between Days”, “Close To Me” y “A Night Like This”, todas ellas consideradas himnos inolvidables de The Cure.
Aprovechando el momento de tanto éxito decidieron publicar un compilado de todos los sencillos, por el décimo aniversario de la banda; llamado Staring at the Sea, que de nuevo fue un gran éxito, con discos de oro y de platino por todo el mundo; The Cure había alcanzado la consagración, pero aún faltaba más historia.
@jorgehhm
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