“¿Y tú ya sabes en qué comunidad vives?”, empieza Vero Delgadillo su alocución para redes sociales (medio de comunicación que es norma para ella), “si eres tapatía, tapatío o vives en esta ciudad es muy importante que conozcas esta información”. La alcaldesa ha decidido que la zonificación para efectos de todos los servicios públicos, desde atención a una banqueta hasta la seguridad pública, se gestione a partir de 11 polígonos.
Delgadillo se basó para ello en los polígonos que originalmente se plantearon para las labores de seguridad, por lo que el resto de las dependencias municipales habrán de adaptarse a este esquema y diluirán cualquier otra regionalización que hayan estado utilizando.
Los polígonos pasan a ser comunidades que deberán constatar que esta decisión hará más eficientes los servicios públicos.
“(Hasta ahora) la ciudad se organizaba a través de 11 polígonos de seguridad. Por otro lado, en términos administrativos de servicios públicos, la ciudad se organizaba a través de siete distritos totalmente distintos a los polígonos de seguridad. Y hablando en términos sociales y de participación ciudadana, se organizaba a través de las 441 colonias de Guadalajara”, explicó la alcaldesa en torno a su decisión. Cada dependencia, por tanto, tenía miradas fragmentadas diferentes de la ciudad y, para mal, muchas veces eso se notaba.
La decisión de Delgadillo, impulsada este jueves en redes sociales, desde hace tiempo se venía estructurando e incluso se solicitó a los habitantes que propusieran cómo bautizar a su comunidad, pero lo cierto es que ahora se ha lanzado a difundir esto que, en los hechos, se trata de una reingeniería al interior de la alcaldía y, una vez más, como ha pasado en temas como el de la basura o el mantenimiento de lugares públicos, la alcaldesa y su equipo se ponen por delante de otras administraciones, incluyendo la que tuvo Lemus en Guadalajara. Con medidas sencillas, a la mano porque son parte de las atribuciones ejecutivas de la alcaldesa, modifican sistemas tradicionales de la administración pública en los que es difícil saber si se mantenían por resultados o porque ya se habían hecho hábito burocrático.
Jaime López-Aranda Trewartha, un analista y consultor oriundo de la ciudad que ha trabajado para diversas organizaciones internacionales, alguna vez debió enfrentar las inercias de los gobiernos mexicanos, lo que se tradujo en una anécdota imperdible: cuando se le consultó sobre un sistema de registro administrativo de robo de vehículos que no funcionaba bien y se le trató de dar una explicación detallada de todos los fallos que estaba presentando y, las molestias que originaba tanto a la policía como a la ciudadanía, interrumpió la sesión y preguntó porqué no se había sustituido el sistema. “Es el sistema que siempre hemos tenido”, fue la respuesta.
En buena medida, la alcaldesa Delgadillo y los jóvenes asesores que la apoyan han optado por recurrir justamente a sustituir lo que todos saben que no funciona, sin importar cuanto tiempo vienen haciéndose las cosas de tal maner.a
El equipo detrás de la alcaldesa, por cierto, es discreto pero se hace cada vez más evidente. Vero Delgadillo tiene una presencia indiscutible por el buen manejo de su figura pública, pero el fondo se está moviendo pues ha decidido que los primeros meses de administrar Guadalajara se tendrán cambios palpables; algunos eran apuestas arriesgadas, como el nuevo sistema de recolección de basura que hubiera sido mile pura para la oposición de haber fracasado; otros que, como la rezonificación única, quizás ahora desaten la pregunta de “por qué nadie lo había hecho antes”.

“¿Qué pasaba al tener tan distintas formas de organización?”, indicó la alcaldesa en su video de difusión de la medida, “no se permitía una coordinación plena entre todos los esfuerzos de la ciudad. Por un lado, la seguridad, por otro lado, los servicios públicos, por otro lado, la política social. Así es que en nuestro gobierno tomamos una decisión muy importante, establecer una nueva forma de organizarnos y coordinarnos en todas las áreas de gobierno y también las áreas de participación social”.
Para la propia alcaldesa, esta medida le brindará un ‘panel de control’ único del municipio capital del estado, pues la situación global de cada una de las 11 comunidades será responsabilidad de todas las oficinas de la alcaldía.
“Investiga en qué comunidad vives y nos va a dar mucho gusto trabajar en equipo contigo para hacer de Guadalajara la ciudad que te cuida”, concluyó el mensaje de Vero Delgadillo en torno a la nueva regionalización urbana.
LAS COMUNIDADES
- Polígono 1, comunidad se llama Centro Histórico.
- Polígono 2 comunidad Alameda.
- Polígono 3, comunidad Fray Antonio Alcalde.
- Polígono 4, comunidad La Barranca de Huentitán
- Polígono 5, comunidad Los Oblatos
- Polígono 6, comunidad Tetlán.
- Polígono 7, comunidad Atlas Olímpica
- Polígono 8, comunidad La Industrial
- Polígono 9, Fresno.
- Polígono 10, comunidad Colomos Minerva
- Polígono 11, comunidad Americana Santa Teresa.