La Fiscalía de Jalisco informó que ya investiga si hubo negligencia en el caso de una enfermera del ISSSTE que habría acudido a denunciar a su ex pareja pero no recibió las medidas de protección adecuadas y terminó siendo asesinada por el hombre con el que se relacionó sentimentalmente, quien, por despecho, ocultó un localizador satelital para seguirla y matarla en una carnicería de la Colonia Jalisco en Tonalá.
Es la Dirección de Responsabilidad Administrativa de la Fiscalía la que ha dado inicio a un procedimiento de investigación -el cual podría derivar incluso en un proceso penal- en torno a la posible negligencia u omisión en el Centro de Justicia para las Mujeres.
El procedimiento, dijo la Fiscalía, tiene como objetivo primordial esclarecer si existieron o alguna averiguación previa u omisiones relacionadas con el feminicidio suscitado el pasado lunes 23 de junio, para que se deslinden “las responsabilidades que correspondan”.
Como lo publicó La Crónica de Hoy, el presunto responsable del crimen, Pedro Iván “N”, fue capturado dos días después del asesinato, por agentes de la Fiscalía con apoyo de la Comisaría Municipal de San Martín Hidalgo, en dicha localidad, a donde había huido tratando de evadir el brazo de la justicia.
EL FEMINICIDIO
El Ministerio Público recibió el reporte de los hechos a las 11:55 horas, del pasado 23 de junio, cuando la Policía de Tonalá reportó que una mujer había sido herida de bala en una carnicería de la Calle Chapala cerca del cruce con Sayula, en la Colonia Jalisco II Sección.
Testigos dijeron que la víctima bajó de un automóvil Mazda, color rojo, e ingresó corriendo al negocio pidiendo ayuda, pero atrás de ella entró un sujeto que le disparó en el tórax y en un brazo, y de inmediato huyó en una camioneta Ford F-150, de color arena.
La mujer agredida falleció en el lugar; durante su funeral, familiares cercanos declararon ante medios de comunicación que la occisa, quien se llamaba Catalina, tenía 37 años y era enfermera del Hospital Valentín Gómez Farías, del ISSSTE, acudió al Centro de Justicia de la Mujer para denunciar las amenazas que sufría de parte de su ex novio pero no fue protegida con alguna medida preventiva.
Indicaron que a “Katy”, como solían llamarla, la atendió un varón quien ni siquiera tuvo a bien levantarle una denuncia, supuestamente porque no vivía con el presunto agresor ni presentaba huellas de maltrato físico.
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Los familiares de la víctima dieron a conocer que se percataron -al parecer después del asesinato- que el feminicida colocó un sistema de rastreo satelital y un micrófono ocultos en el automóvil de la mujer, para seguirla y espiarla, pues no aceptaba la ruptura de la relación.
El presunto responsable del crimen está a disposición de un juez en el complejo penitenciario.