Tener sistemas menos crueles cambia exponencialmente la vida de los animales criados para el consumo humano. Si bien la manera más directa y poderosa que tenemos para acabar su sufrimiento es elegir una alimentación respetuosa y de origen vegetal, no podemos obviar que en esta transición a un mundo más compasivo seguirá habiendo millones de animales explotados. Cambiar las condiciones en que esto sucede es una necesidad urgente para reducir el dolor sistemático que actualmente viven.
Acabar con las jaulas en los sistemas de explotación es uno de los pasos más importantes que como sociedad debemos exigir para acabar con el confinamiento extremo, una práctica que simplemente es incompatible con el bienestar animal. Ese es uno de los principales frentes en los que trabaja la organización Igualdad Animal, dedicada a la protección de los animales en granjas, los más maltratados e invisibilizados.
Parte de esta estrategia es lograr que empresas se comprometan a transitar hacia sistemas sin jaulas y exhibir a aquellas que se resisten o no informan al respecto. Por ejemplo, en Estados Unidos y Europa, la organización encabeza una campaña dirigida a la firma internacional Ahold Delhaize (uno de los mayores grupos minoristas de alimentación del mundo), que en 2014 se comprometió públicamente a eliminar las jaulas en su cadena de suministro de carne de cerdo y huevos. Más de una década después, las imágenes obtenidas por Igualdad Animal demuestran que la empresa no ha cumplido su promesa.
De manera paralela, a nivel internacional, la organización lanzó recientemente una campaña dirigida a la cadena de hoteles Marriott International, que en 2018 se comprometió a eliminar las jaulas de su cadena de abasto de huevo, y que a medio año de la fecha prevista para su cumplimiento no ha informado avances claros. Debido a que se trató de una política global asumida por la empresa, las acciones de Igualdad Animal se realizan en México, Estados Unidos, Europa y Brasil.
A nivel México, la organización también ha logrado que empresas asuman este urgente compromiso y mientras algunas avanzan para cumplirlo, otras se han desatendido, como la cadena de restaurante Toks, que a 9 años de prometer eliminar las jaulas, ahora simplemente he decidido ignorar el sufrimiento de las millones de gallinas que ponen los huevos que se sirven en sus sucursales.
Cambiar estos sistemas crueles es posible. A finales de julio, Suecia informó que las jaulas en su industria del huevo ahora son historia, lo que sin duda impactará en millones de gallinas que ya no pasarán toda su vida sin poder siquiera extender sus alas. En una reciente entrevista, Dulce Ramírez, Directora de Igualdad Animal México envió un mensaje: “A quienes se llenan los bolsillos a costa de la vida y el sufrimiento de los animales, no se los vamos a permitir”, en un llamado a la sociedad a exigir a las empresas cambios reales.