Circular entre los autos, pasarse altos a toda velocidad sin importar que pasen autos, transitar en sentido contrario, invadir el carril confinado del Metrobús y en general romper las reglas de tránsito, son el común denominador de los ciclistas en la Ciudad de México, donde a decir de varios ciclistas entrevistados por Crónica, es parte de la adrenalina al vivir en una ciudad tan acelerada y donde el ritmo de vida es andar aprisa todo el tiempo.

El uso de la bicicleta ha tenido un crecimiento importante en los últimos años, sobre todo en la capital del país, sin embargo, con el crecimiento también llegó el desorden, donde las reglas no se respetan, si cometen faltas viales con riesgo de sufrir algún accidente e incluso desafiando las obligaciones que como ciclistas se deberían respetar.

Un ciclista abordado por este diario y que circulaba sobre Paseo de la Reforma, asegura que los ciclistas han ganado sus derechos pedaleando, pero, ¿qué hay de sus obligaciones?

Los defensores del uso de este medio de transporte argumentan algunos vacíos en el reglamento por la falta de claridad en las mismas reglas, sin embargo, ciudadanos de a pie consideran que lo que falta es una real cultura de respeto al uso de la bicicleta y acatar sus normas.

Crónica constató en varios cruceros importante de la Metrópoli cómo varios ciclistas no respetaron las luces del semáforo en rojo, circulaban entre los autos e incluso invadían el carril exclusivo del Metrobús.

Una ciclista que circulaba por la Glorieta del Ángel de la Independencia se le cuestionó ¿Por qué se pasó el semáforo en rojo? Se justificó al decir: “Me lo pasé porque llevaba prisa y no había autos” y sin tardanza continuó su recorrido fuera de la ciclovía.

DESMANES Y ACCIDENTES.

Doña Teresa vende dulces sobre Paseo de la Reforma, a la altura de la Glorieta donde estaba la Palma, y cuenta que ha sido testigo en repetidas ocasiones de faltas que cometen ciclistas, lo que ha derivado en conflictos que afectan la circulación vial.

“Tiro por viaje los coches les pitan porque aquellos (los ciclistas) se pasan los altos, apenas la semana pasada un taxista le echó bronca a uno, se dijeron de cosas, se calentaron y se agarraron a golpes”. Explicó

También la falta de prudencia de algunos ciclistas al ignorar las reglas de tránsito ha sido una de las principales causas de accidentes.

Vicente, vecino de la colonia Narvarte en la alcaldía Miguel Hidalgo, atestiguó un accidente hace un mes. El percance se registró sobre avenida Cuauhtémoc y Viaducto.

“Se metió (el ciclista) en el carril del Metrobús e intentó rebasarlo, luego se cerró otro coche y fue cuando el de la bici perdió el control y el bus lo aventó y voló como metro y medio, dos metros tal vez”.

Don Vicente cuenta que a pesar de que no fue de tanta gravedad el accidente, ya que el de la bicicleta nunca perdió el conocimiento, tuvieron que llamar a la ambulancia para descartar lesiones, aunque si tenía golpes en brazos y piernas.

Aunque el Artículo 30 del Reglamento de Tránsito prohíbe a los ciclistas circular por los carriles de confinados del Metrobús, muchos ciclistas ignoran esta regla y siguen invadiendo este carril confinado. “Se prohíbe circular o estacionarse en los carriles exclusivos, confinados y/o prioritarios de transporte público”. Sin embargo, es una acción muy repetitiva en los carriles de las unidades de transporte.

Además de que circulan a toda velocidad sin importar que pasen carros, como en Cuauhtémoc y Avenida Baja California, donde en plena hora pico del tránsito avanzan a gran velocidad entre los autos.

“Avanzo más rápido, ocupo ese carril porque acorto un buen de tiempo…No es justificación, pero son ventajas de ser ciclista”, dijo un joven que defendió el uso de este medio de transporte sin respetar las reglas.

En la Alameda Central, otro ciclista también justificó no detenerse y pasarse la luz roja, según él, por la urgencia de llegar pronto a su trabajo: “Si no, no llego a la chamba”.

VIDA ACELERADA.

Don Floriberto vende café y pan por las mañanas cerca del Metro Bellas Artes, dice que el ritmo de la Ciudad de México es muy acelerado y eso incita a que ciclistas y automovilistas lleven prisa todo el tiempo.

“La ciudad es muy acelerada y más el centro, por eso aquí hay muchos accidentes, todos quieren llegar rápido a sus trabajos, escuelas y por eso luego ni se fijan, también he visto como se pasan sin voltear a ningún lado y hasta con audífonos”, apuntó.

De acuerdo a Gabriel Carreón, Subsecretario de Control de Transito de la Ciudad de México, el artículo 30 del ordenamiento vial, la sanción para los ciclistas que no respetan las normas de tránsito es solo una amonestación verbal, por lo que es necesario la implementación de multas a esta creciente movilidad urbana.

Son pocos los ciclistas que conocen las reglas y señalamientos de tránsito, otros justifican sus faltas asegurando que cuando cometen alguna infracción, es con precaución.

“Me ha pasado que voy en sentido contrario del carril y las personas están paradas en la ciclovía, no se dan cuenta como vengo en sentido contrario, pero tampoco ellas deberían estar paradas en el espacio de ciclistas”

Rosa se encontraba en la ciclovía esperando la luz verde cuando un ciclista paso muy cerca de ella le grito: súbase a la banqueta, después el ciclista se pasó el alto.

“No tienen derecho a aventarse ¿y la responsabilidad del conductor dónde queda? Si todos nos respetamos, todos avanzamos” expreso Rosa.

La contra parte explica: “una vez me caí por una señora que estaba en la ciclovía y resbale por no pegarle”.

Otra de las imprudencias que cometen los ciclistas es el uso de audífonos y celular, no obstante, para algunos no es problema.

“Los audífonos no me distraen, al contrario, me desestresa y distrae más escuchar los cláxones y camiones, pero si me voy fijando, no creo que me desconcentren, nunca me he caído ni nada” dice un ciclista que circulaba con audífonos.

CICLOVÍAS.

La Ciudad de México cuenta con 25 ciclovías que suman un total de 170.11 km. Sin embargo, los ciclistas destacan que hay escasez de ciclovías en las periferias de la ciudad.

“Hacen falta más ciclovías, aquí en el centro siempre hay, yo soy de Azcapo y según iban a poner una ciclovía, pero solo le pusieron conos naranjas, le ponen más atención al camellón y la disque ciclovía quedó abandonada”.

Hay quienes siguen optando por circular entre los autos, ellos le llaman “ratonear”, es otra de las desobediencias más comunes que cometen exponiéndose a sí mismos y, además, pudiendo provocar incidentes automovilísticos.

Otros, simplemente lo hacen por adrenalina: “A mí me gusta zigzaguear por adrenalina y también porque voy esquivando baches y vidrios”.

Quien desafió las reglas de tránsito también fue Brenda, ella iba en sentido contrario sobre Paseo de la Reforma y se detuvo no porque reconoció su falta, sino para fumar un cigarro, esta joven expresa que ir en sentido contrario disminuye su tiempo de recorrido. “Son como atajos, mientras más avanzas también conoces las rutas, descubres que puedes ahorrar tiempo si te vas entre calles”.

EXCEPCIONES.

Son muy pocos los ciclistas que respetan las señales de tránsito, como es el caso de Carlos “Yo si aplico las señales de ciclistas, eso de sacar la lengua (cuando el ciclista señala si va a izquierda o derecha), respetar los altos, etc.”

Carlos, circulaba sobre viaducto y asegura que el reglamento de tránsito en el artículo 17 dice que está permitido pasarse altos siempre y cuando sea con precaución, él afirma que siempre se fija en ambos lados para cerciorarse que puede pasar con seguridad. No obstante, expresa que pese a respetar el reglamento, no existe un respeto por parte del peatón ni de los automovilistas.

“De todas formas, luego se atraviesan las personas, aunque no esté el alto, no hay respeto del peatón también hay muchos automovilistas que no usan las direccionales, no tienen educación vial porque, por ejemplo, cuando van a la izquierda o derecha no usan las intermitentes y se dan la vuelta sin avisar”

COMPROMISO

Al adquirir una bicicleta se adquiere un vehículo que tiene derechos y obligaciones. En la Ciudad de México, de acuerdo al reglamento de tránsito, los ciclistas no deben circular entre los autos, en los parques y banquetas, ni transitar en sentido contrario.

El 21 de enero de 2021, el gobierno de la CDMX presentó el “Plan de protección al ciclista”, que consiste en una serie de medidas para mejorar la seguridad vial y protección de los usuarios de este transporte y del que los ciclistas lo desconocen.