Los fieles a San Judas Tadeo regresaron fervorosos para venerar al "santo de las causa difíciles". Los alrededores de la Iglesia de San Hipólito, en las inmediaciones de la estación Hidalgo del Metro, se congregaba por decenas de personas desde la noche de este miércoles y a unas horas para la celebración del Día de San Judas Tadeo.

No hay miedo al contagio del peligroso SARS-CoV-2. Los fieles mostraban sus rostros en todo su esplendor, donde el cubre-bocas y la sana distancia eran los grandes ausentes. Risotadas. La boca abierta para beber agua tras kilómetros de peregrinar, seguramente como una de las mandas que cada año alguno le debe cumplir al santo de la túnica verde con blanco.

Provenientes de la Zona Metropolitana del Valle de México, a pie, en motos, en camionetas o bicicletas y también de rodillas. Rostros de todas las edades, los más de decenas de jóvenes tatuados.

"Me la hiciste San Juditas. ¡A güevo que por ti estoy libre!", exclamaba un joven, de unos 26 años que sujetaba la mano derecha de su novia. En su brazo izquierdo cargaba una figura del santo, de menos de un metro de altura.

Luego de que el año pasado no pudieron visitar la iglesia de San Hipólito, este jueves el recinto religioso de verá desbordado.

El área es vigilada por patrullas de la policía capitalina, mientras el paso de los automóviles y del Metrobús tendrán una jornada difícil ante la imposibilidad de transitar por la zona.