
Washington y Kiev firmaron este miércoles un acuerdo para la explotación conjunta de minerales ucranianos que podría definir el rumbo de la guerra, ya que supone el paso más serio de Estados Unidos para equilibrar la balanza del lado ucraniano, en perjuicio de los invasores rusos y de su admirado Vladimir Putin.
Tras semanas de presiones y de idas y venidas, que incluyeron un bochorno espectáculo a gritos de Trump contra Zelenski en la Casa Blanca, se concretó finalmente el acuerdo que dará acceso prioritario a las empresas estadounidenses a nuevos proyectos de inversión para explotar las riquezas naturales ucranias −recursos clave como el aluminio, el grafito, el petróleo y el gas natural−, como el magnate republicano exigía, con el fin de recuperar parte de las aportaciones de Washington en la defensa de Kiev.
“Este acuerdo señala claramente a Rusia que la administración de Trump está comprometida con un proceso de paz centrado en una Ucrania libre, soberana y próspera a largo plazo. Ningún estado o persona que haya financiado o suministrado recursos a la máquina de guerra rusa podrá sacar tajada de la reconstrucción de Ucrania“, declaró el secretario del Tesoro, Scott Bessent.
La alianza “fortalece la colaboración estratégica entre las partes para la reconstrucción y modernización a largo plazo de Ucrania, en respuesta a la destrucción a gran escala causada por la invasión rusa”, según el documento, al que tuvo acceso la agencia Bloomberg.
El texto también resuelve dos puntos de la negociación que habían estado en el aire en las últimas semanas. Por un lado, el pacto no se vincula a ningún compromiso de Ucrania de renunciar a su entrada en la Unión Europea, como en algún momento pretendieron los negociadores estadounidenses. Por el otro, deja fuera la idea de Trump de que el dinero obtenido por la explotación de esos recursos naturales sirva para devolver las decenas de miles de millones de dólares aportados por Estados Unidos desde el inicio de la guerra.
El borrador contempla la creación de un fondo conjunto para gestionar los proyectos de inversión de Ucrania. También otorga a EU acceso privilegiado a nuevos proyectos para desarrollar los recursos naturales del país, como el aluminio, el grafito, el petróleo y el gas natural. Una vez se firme, viajará al Parlamento ucranio para su ratificación.
La firma llega en un momento simbólico para Trump, que cumple 100 días en el cargo, acosado por bajos índices de aprobación y las malas noticias, que hablan de la primera contracción de la economía desde 2022, así como por su impaciencia para lograr que Rusia y Ucrania firmen un acuerdo de paz que durante la campaña prometió que llegaría en su primera jornada en el cargo.
Los aproximadamente 175,000 millones de dólares enviados por EU para apoyar a Ucrania desde que comenzó la gran invasión rusa son esenciales para la supervivencia del país agredido. Trump ahora no solo da a entender que desea acabar con la guerra, sino que sus gestiones van a ir acompañadas de algunas contrapartidas económicas para recuperar, al menos, parte de esa ayuda.
¿Cómo reaccionará Putin?
Aunque no se acordó la reanudación de armamento estadounidense a Ucrania, el acuerdo supone el paso más decisivo de Trump para ponerse del lado de Zelenski, lo que podría enturbiar rápidamente las relaciones de EU con Rusia, única potencia que se libró de los aranceles de Trump.
A falta de la reacción del Kremlin, se desconoce aún cómo influirá este acuerdo en las negociaciones para poner fin a la guerra que ordenó Putin con la invasión rusa de febrero de 2022, que se encuentran metidas en un callejón sin salida.
Mientras tanto, Rusia ha intensificado sus ataques sobre Ucrania en estas semanas. Un misil acabó el jueves con la vida de 12 personas en Kiev, en el peor ataque sobre la capital desde el pasado verano.
En las últimas horas, la ciudad de Járkov, entre otras, recibió un ataque con drones que causó al menos un muerto y decenas de heridos. El Kremlin aspira a un acuerdo de paz que supondría ganar el control sobre cuatro provincias ucranianas. Steve Witkoff, enviado de Trump para negociar con el presidente Putin, tiene el encargo de convencerlo de firmar un pacto que deje las fronteras entre ambos países a la altura del frente actual.
Aviso a China
Ucrania posee yacimientos de 22 de los 50 materiales clasificados como críticos por el Servicio Geológico de EU, y eso incluye recursos de tierras raras y otros materiales esenciales para la producción de productos electrónicos, tecnologías de energía limpia y armamento.
En este debate asoma China, que lidera la producción mundial de minerales de tierras raras y otros materiales de importancia estratégica, lo que ha movido a los países occidentales a buscar alternativas como la que ahora acaricia EU en Ucrania.
Rusia explota y comercia de forma ilegal en la última década, desde que ocupó la península de Crimea y parte de la región ucrania de Donbás, recursos naturales de Kiev, así como cosechas de sus explotaciones agrícolas (con información de EFE, El País y NYT).