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Muere el “Goebbels” norcoreano y creador del culto a la personalidad del clan Kim

Kim Ki-nam, muerto a los 94 años, está detrás de la ideología juché de exaltación divina de los líderes de la monarquía comunista, en el poder desde 1948

obituario

El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, rinde tributó al ideólogo del régimen, Kim Ki-nan

El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, rinde tributó al ideólogo del régimen, Kim Ki-nan

Yonhap

Corea del Norte despidió este miércoles a Kim Ki-nam, el ideólogo que convirtió el país en una gigantesca secta para rendir culto al fundador del régimen fundado en 1948, Kim Il-sung, y a sus herederos de esta hermética monarquía comunista asiática: su hijo Kim Jong-il y el actual líder supremo, Kim Jong-un.

Kim Ki-nan, jefe de propaganda del régimen de Corea del Norte

Kim Ki-nam, jefe de propaganda del régimen de Corea del Norte

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Considerado el “Goebbels norcoreano” (en alusión al siniestro jefe de la propaganda nazi que impulsó el culto a Hitler y acuño la frase “una mentira mil veces repetida se convierte en una verdad ), Kim Ki-nam falleció el martes a los 94 años, según informó este miércoles la agencia central de noticias norcoreana KCNA.

A pesar de compartir apellido Kim , el fallecido no tenía vínculos sanguíneos con la estirpe gobernante, pero para Kim Jong-un era una especie de padre espiritual. Esto se hizo evidente en la edición de este miércoles del diario oficialista Rodong Sinmun, que abrió su edición con la foto de Kim Ki-nam y el anuncio de su muerte en portada y relegara a una inaudita segunda página las fotos de la visita de Kim Jong-un a sus exequias, lo que da idea del peso de su figura dentro del régimen.

Kim "guardó un momento de silencio" en memoria del fallecido y depositó una ofrenda floral junto al féretro acristalado en el que reposaban los restos de Kim Ki-nam, según la información e imágenes publicadas por la agencia estatal KCNA. El ideólogo llevaba hospitalizado desde 2022 por múltiples dolencias, incluyendo problemas renales, según medios norcoreanos.

Al líder norcoreano le acompañaron en su visita a las exequias otros cuatro miembros del Presidium del Politburó: Kim Tok-hun, Jo Yong-won, Choe Ryong-hae y Ri Pyong-chol, además de otros integrantes del Comité Central del partido único norcoreano.

"En el interior de la sala donde resonaba la música fúnebre, reinaba el clima de pesar por la pérdida del veterano del Partido de los Trabajadores de Corea y la revolución coreana, teórico de prestigio y activista político ilustre que realizó grandes méritos a la hora de defender y glorificar la idea revolucionaria y causa de la idea Juché (en coreano, autoconfianza en el líder, en las masas, en la economía de autoconsumo y en el Ejército)".

“Sistema ideológico monolítico”

Nacido en lo que hoy es la provincia nororiental china de Heilongjang en 1929, cursó estudios en la Universidad Kim Il-sung y la Universidad Internacional de Moscú.

Trabajó después en el seno del Comité Central y en el Departamento de Propaganda y Agitación, donde en los sesenta "hizo una gran contribución a la causa del Partido con un alto grado de perspicacia política, nivel teórico y escritura madurada" trabajando en el establecimiento del llamado "sistema ideológico monolítico", que impuso a la fuerza la veneración de los miembros de la familia por encima incluso de las cuestiones ideológicas en la sociedad norcoreana. Al frente de la Propaganda y Agitación estuvo 32 años, puesto en el que lo relevaría Kim Yo-jong, hermana de Kim Jong-un, en 2017.

Kim llegó a ser redactor jefe del diario Rodong y presidente del Comité Central del Sindicato de Periodistas norcoreano, y en el Congreso del partido único de 1980 fue nombrado miembro del Comité Central del Partido de los Trabajadores.

Considerada una figura muy cercana a Kim Jong-il (padre del actual líder), fue miembro de su comité funerario, además de formar parte del cortejo fúnebre que desfiló junto a su féretro por las nevadas calles de Pionyang en diciembre de 2011.

Pero ante todo fue una figura importante a la hora de establecer el relato sobre la legitimidad de la primera sucesión dinástica en Corea del Norte de cara a que Kim Jong-il lograra hacerse con las riendas del país en los noventa.

En 2016 fue elegido miembro de la recién creada Comisión de Asuntos Estatales y a partir de 2018 comenzó a aparecer cada vez menos en público hasta solo hacerlo ya de manera muy esporádica hasta su muerte.

Los analistas coinciden en que Kim Ki-nam fue uno de los principales artífices de apuntalar la legitimidad del régimen durante tres generaciones y que ejerció una gran influencia en las políticas del país. Su papel como principal arquitecto de las narrativas oficiales del Estado le granjeó notoriedad en Corea del Sur.

Uno de los pocos en visitar Corea del Sur

Kim Ki-nam fue uno de los pocos funcionarios norcoreanos que visitó Corea del Sur. En 2009, encabezó una delegación funeraria tras la muerte del presidente surcoreano Kim Dae-jung, impulsor de una era de reconciliación entre Seúl y Pyongyang conocida como la “Política del Sol” que se extendió desde 1998 hasta 2007. En el año 2000, Kim Dae-jung protagonizó una histórica visita al Norte que avivó las esperanzas de paz en la península. Ese mismo año, fue galardonado con el Nobel de la Paz.

La muerte de Kim Ki-nam se produce en un momento en el que Pyongyang está endureciendo su discurso antioccidental, tanto en clave nacional como internacional, además de aumentando su belicosidad. A finales de 2023, las autoridades norcoreanas anunciaron que, en adelante, el país trataría a Corea del Sur como un Estado enemigo hostil y, este año, se eliminó de la Constitución la idea de una reunificación pacífica.