El precio de la gasolina sigue siendo un tema central en el debate político, ahora con el PRI y PAN alzando la voz para exigir al gobierno federal una reducción en los impuestos aplicados al combustible.
El presidente del PRI, Alejandro Moreno, lanzó un mensaje en sus redes sociales este lunes en el que expresó su preocupación por el alto costo de la gasolina, destacando que cerca del 40% del precio de cada litro corresponde a impuestos como el IEPS (Impuesto Especial sobre Producción y Servicios). Según Moreno, este esquema fiscal afecta principalmente a los mexicanos que dependen del transporte para cumplir con sus actividades diarias, ya sea para trabajar, estudiar o realizar gestiones cotidianas.
El líder priista criticó que, a pesar de las promesas del gobierno de Morena, no se han implementado soluciones reales para aliviar esta carga, y agregó que, mientras las familias luchan contra una inflación persistente, el gobierno sigue obteniendo una gran parte del precio de cada litro de gasolina, sin ofrecer alternativas concretas para apoyar a los ciudadanos.
Días antes, el Partido Acción Nacional (PAN) también había expresado su inconformidad con las políticas de Morena. El presidente nacional del PAN, Jorge Romero Herrera, recordó que antes de llegar al poder, Morena había prometido reducir el precio de la gasolina. Romero subrayó que, en campaña, habían prometido que el costo del litro podría bajar hasta los 10 pesos, una promesa que, según el líder panista, no se ha cumplido. Actualmente, el precio ronda los 25 pesos por litro.
El dirigente del PAN insistió en que el verdadero problema son los impuestos aplicados al combustible, que representan una parte significativa del precio final. Afirmó que, si el gobierno realmente quisiera apoyar a las familias mexicanas, podría reducir estos impuestos.
Ambos partidos coinciden en que la eliminación o reducción del IEPS podría ser una medida eficaz para bajar el precio de la gasolina. Esta propuesta, subraya que los altos costos de los combustibles tienen un impacto directo sobre otros productos y servicios esenciales, como el transporte público y privado, así como los alimentos y medicamentos.
Aunque el gobierno federal ha defendido su postura alegando que los precios de los combustibles están determinados por factores internacionales y la inflación global, las críticas de PRI y PAN insisten en que la reducción de impuestos podría ser una solución interna para aliviar el impacto económico que enfrentan las familias mexicanas.