Los seis grupos parlamentarios de la Cámara de Diputados expresaron su “absoluto rechazo” a la iniciativa de imponer un doble impuesto a las remesas que envían los migrantes mexicanos, medida que es discriminatoria, abusiva y que se encuentra a discusión en la Cámara de Representantes de Estados Unidos
La iniciativa del legislador republicano Jason Smith de establecer un doble impuesto sobre las remesas que las personas migrantes envían a sus familias es un atentado contra la dignidad de nuestras y nuestros paisanos migrantes que trabajan en aquel país y está pensada con claridad política y humana que no logra observar que podría provocar recurrir a otro tipo de medios para garantizar que los envíos de recursos económicos sean realizados de formas menos seguras, atentando contra los principios sociales y democráticos que tanto México como Estados Unidos han fortalecido históricamente, así como a instrumentos internacionales suscritos por ambas naciones.
Este posicionamiento fue emitido por el presidente de la Mesa Directiva en San Lázaro, Sergio Gutiérrez Luna, quien indicó que, a diferencia de la postura respecto de aranceles, que implican un impuesto al comercio internacional, la propuesta del legislador republicano de establecer un impuesto del 5%, añadido al del 20% que ya pagan, atenta directamente contra las personas y sus ganancias fruto de su trabajo.
“No sólo debe ser inadmisible para nuestro país, sino debe considerarse una alerta internacional contra los valores fundamentales expresados por la mayor parte de las naciones, mismas que han firmado y defendido la Declaración Universal de los Derechos Humanos. En México hemos sostenido incansablemente que la respuesta a las dificultades y problemáticas en las naciones debe ser siempre el diálogo, sin embargo, esto no impide que nos expresemos en contra de propuestas que lesionan gravemente el bienestar de las familias y las personas”, sostuvo Gutiérrez Luna.
El diputado morenista reiteró que los migrantes no son criminales, por el contrario, nuestras y nuestros paisanos hacen un gran esfuerzo por mantener a sus familias en nuestro país y por eso buscan que sus trabajos sean realizados con la mayor responsabilidad y determinación.
Las trabajadoras y trabajadores migrantes son un gran impulso para ambas naciones, fortaleciendo la cooperación económica y política y el desarrollo binacional de México y Estados Unidos.
Reconoció que con su trabajo contribuyen en gran medida al desarrollo de la economía y sociedad de ambas naciones y es evidente que el pago por su trabajo es de ellas y ellos.
“Hacemos un llamado a la reflexión, la cooperación y la cancelación de la propuesta del republicano Jason Smith. Busquemos el diálogo y los entendimientos para que la razón y las buenas relaciones entre las naciones siga prevaleciendo”.