
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, exigió este miércoles al Gobierno de Estados Unidos que aclare “cómo y por qué” permitió el ingreso a territorio estadounidense de 17 familiares de Ovidio Guzmán —hijo de “El Chapo” y líder de la facción “Los Chapitos” del Cártel de Sinaloa— pese a que esa administración proclama no negociar con terroristas.
En su rueda de prensa, Sheinbaum recordó que, mientras EE.UU. designa a ciertos cárteles mexicanos como organizaciones terroristas, “de manera unilateral” autorizó, el pasado 9 de mayo en Tijuana, la entrega voluntaria a autoridades estadounidenses de la madre y otros 16 parientes de Guzmán, confirmada por el secretario de Seguridad federal, Omar García Harfuch.
“Si hay una política de ellos de no negociar con terroristas y han decidido nombrar a algunos grupos del crimen organizado como terroristas, que informen si hay un acuerdo o no”, subrayó la mandataria.
“Deben explicarle al pueblo de Estados Unidos cómo es que, si están llegando a un acuerdo, lo hacen. Y a México, obviamente: primero, son mexicanos; segundo, uno de sus familiares fue extraditado.”
Contradicciones y presiones
Sheinbaum advirtió que de esta aparente contradicción podrían derivarse presiones para intervenir en territorio nacional bajo el pretexto de combatir al terrorismo. Por ello, destacó la relevancia de la reciente reforma constitucional que fortalece la soberanía mexicana y establece límites a cualquier intervención foránea en nombre de la lucha contra la delincuencia organizada.
“La definición de un grupo de la delincuencia como terrorista no debe utilizarse para intervenir en México. Tenemos reglas claras en la relación bilateral: respeto a la soberanía y coordinación”, remarcó la presidenta.
Este episodio se suma a la extradición de Ovidio Guzmán en septiembre de 2023 y la de su hermano Joaquín en julio de 2024, ambos procesados por cargos de narcotráfico y actualmente negociando acuerdos de culpabilidad en tribunales de EU.