Oriundo de Ciudad Obregón, Germán Guadalupe Miller García, ingeniero mecánico y operador del Centro de Control de Distribución CFE, relató a Crónica de qué manera entreteje una exitosa carrera dentro de la Comisión Federal de Electricidad con otro trabajo de capital importancia, la paternidad.
El CCD
El Centro de Control de Distribución (CCD) en el que Germán labora es uno de los 88 que existen a nivel nacional y cuya actividad estriba en monitorear y controlar el suministro eléctrico de todas las redes de distribución. Una tarea que exige a los operadores como el Ing. Miller altas dosis de experiencia y responsabilidad.
Es justamente una experiencia de larga data, aquella que Miller ha ganado a lo largo de 14 años al servicio de la Comisión, la que ha recompensado al pulcramente afeitado ingeniero con la sapiencia y los conocimientos necesarios para dirigir y guiar a sus compañeros en campo en las labores de restablecimiento de la red eléctrica allí, donde quiera que se necesite.
Entre consolas, monitores y desplegados de cartografía digitalizada que muestran el estado de las líneas eléctricas en tiempo real y que contemplan variables tales como los vientos, la pluviometría y la sismicidad, Miller da cuenta de cómo los años laborados como liniero de baja tensión y luego como personal de mantenimiento en campo, le han conducido a ocupar hoy día un lugar como operador del CCD ubicado en la Alcaldía Álvaro Obregón, sitio encargado de garantizar el suministro eléctrico, de forma eficaz y constante, salvando averías y desastres, en áreas tan vastas como de Coyoacán a Valle de Chalco y Paso de Cortés, al sureste de la capital mexicana, o tan extensas como aquellas que se despliegan hasta Santa Fe, Toluca, Tenango, Malinalco y emplazamientos estratégicos de telecomunicaciones, aeropuertos, pozos de agua y la Central de Abasto, en Iztapalapa. Todo, al tiempo que se es padre de una pareja de gemelas de 15 años de edad y una pequeña de tan solo 10 años de edad.
Involucrarse
Para Miller, paternidad y trabajo han sido una constante que asume con dos cualidades que repite con frecuencia, lo que sugiere que, para él, son la base del éxito laboral y familiar: Responsabilidad y concentración. Y es que el ingeniero relata una historia cuyo leitmotiv versa sobre involucrar al núcleo familiar en la vida y en los quehaceres laborales; cuenta que, a través de la CFE sus hijas y esposa, han podido empaparse de la importancia, del nivel de riesgo y del grado de responsabilidad que sus tareas implican, programas de la Comisión tales como “Visitando a Papá” o los torneos de campo a nivel divisional y nacional -una suerte de olimpiadas internas de grado técnico que involucran las maniobras del personal de campo-, contribuyen a cerrar cualquier brecha que pudiera generarse entre Miller, su trabajo y familia. Por cierto, desde 2013 el ingeniero ha sido campeón divisional y nacional en múltiples ocasiones; “siempre ha ganado”, “entre los 16 mejores del país”, dicen por ahí.
Día del Padre
La labor de Germán en este CCD no solo alimenta sus aspiraciones profesionales y personales, sino que le ha llevado a cosechar un sentido de responsabilidad y deber de gran calado frente a dos millones de usuarios que cuentan con la perenne presencia de un bien de primera necesidad, como lo es la electricidad. Este sentido del deber, enfocado a mantener el flujo constante de energía o a restablecerlo para la mayor cantidad de personas en el menor tiempo posible, cada vez que algo lo interrumpe, hace del ingeniero Miller un ejemplo de entereza profesional y calidad humana para su familia y compañeros. Más allá de referirse a sus menesteres como un trabajo, Germán se expresa con vocación.
Ante las preguntas entorno a cómo el ingeniero compagina los tiempos de una labor que le exige turnos mutables, guiar cuadrillas en campo de forma remota, procurar el correcto uso de equipo altamente especializado y costoso, así como mantenerse disponible y listo para actuar frente a emergencias y situaciones de desastre, como le ocurrió tras el sismo de septiembre de 2017 y el huracán Otis en octubre de 2023, con el ritmo de la vida familiar y los eventos que ésta acarrea tales como cumpleaños, graduaciones, días del padre o días de las madres, Miller asegura que los mejores aliados son la adaptabilidad y la presencia, aprovechar al máximo cada momento disponible para explotar espacios de convivencia con su esposa e hijas, salir a conocer otros sitios, charlar de lo importante y lo profundo.
Este Día del Padre el ingeniero Miller, operador del Centro de Control de Distribución adscrito a la División de Distribución Valle de México Sur CFE, campeón nacional, el de ascenso meteórico y ávido por concretar metas, reconocido por su liderazgo y vocación de servicio, y padre de tres, estará de turno vespertino. Pero no sin antes celebrar su día rodeado de la familia y sus hijas, de quienes reconocen sus compañeros, son sus más grandes admiradoras.