La presidenta Claudia Sheinbaum rechazó que las decisiones de su gobierno provengan del presidente Andrés Manuel López Obrador, calificando como “una narrativa bastante misógina” las acusaciones que buscan atribuirle falta de autonomía.

Durante su intervención pública, Sheinbaum explicó que fue decisión suya no invitar al rey de España a su toma de protesta, en referencia a las tensiones diplomáticas derivadas de la carta enviada por López Obrador en 2019, donde pedía un reconocimiento por los agravios de la conquista.
“En aquel momento, es parte de la narrativa, bastante misógina por cierto, de que las decisiones, incluso de nuestro gobierno, vienen de otro lado o del presidente López Obrador. Y, pues es obvio que no”, señaló.
Relató que cuando informó al mandatario federal sobre su decisión, él le respondió que no era necesario incorporar las discrepancias con España al nuevo gobierno, pero ella mantuvo su postura “por convicción”.
“Le dije, es que no lo hago porque usted me lo diga o no me lo diga, sino lo hago por convicción”, agregó.
Sheinbaum subrayó que la carta enviada por López Obrador al rey de España fue “muy diplomática y amable”, y que el objetivo era construir una nueva relación basada en el reconocimiento de los pueblos originarios y la historia común.
Asimismo, defendió el modelo mixto de generación eléctrica que actualmente opera en México, al asegurar que mantiene tarifas estables y fortalece el sistema energético nacional.
Finalmente, sostuvo que la Cuarta Transformación ha traído consigo un reconocimiento de la dignidad del pueblo mexicano, especialmente de los pueblos originarios, a quienes consideró “la grandeza cultural de México”.
“En el momento que se reconoce eso, el pueblo de México se empodera. Y hoy está más empoderado que nunca”, concluyó la mandataria.