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Hígado, no da síntomas graves de enfermedad hasta que ha desarrollado cirrosis

Hígado graso no alcohólico en México duplica la prevalencia a nivel mundial. Factores de riesgo: alimentación, sedentarismo y el gen PNPLA3, presente en la población de Latam

Salud

Especialistas en hepatología, destacaron que factores de riesgo como obesidad, sobrepeso, hipertensión, diabetes, sedentarismo, son factores de riesgo para hígado graso no alcohólico

Especialistas en hepatología, destacaron que factores de riesgo como obesidad, sobrepeso, hipertensión, diabetes, sedentarismo, son factores de riesgo para hígado graso no alcohólico

En México los altos índices de personas que viven con diabetes (diagnosticados y no), hipertensos y con sobrepeso u obesidad, son una población en riesgo para desarrollar la Enfermedad por Hígado Graso no Alcohólico (EHGNA).

Otro factor de riesgo, es el gen PNPLA3, el cual esta muy presente en la población latinoamericana, Por lo que los mexicanos estamos más propensos a presentar alteraciones en este gen, señaló el doctor Nicolás Fernández, integrante de la Asociación Mexicana de Gastroenterología.

La detección temprana es de suma importancia para evitar que evolucione a fibrosis, cirrosis e incluso cáncer hepático, pues este padecimiento se está convirtiendo en la primera causa de trasplante hepático en el mundo.

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Fernández puntualizó que la prevalencia de la Enfermedad por Hígado Graso no Alcohólico (EHGNA) a nivel mundial es del 25%. Sin embargo, en México, “esta cifra se encuentra niveles cercanos al 50 por ciento”, lo que deja ver, dijo, la importante necesidad de informar más a la población en general, respecto de la importancia de llevar una vida saludable desde temprana edad, para que en la adultez, no se tengan estas complicaciones en la salud.

Indicó que factores de riesgo no modificables son: ser hombre, en edad adulta, ser mayor de 50 años, pero si se pueden cuidar aspectos como: obesidad y/o sobrepeso, para no desarrollar diabetes, hipertensión, hipercolesteremia, síndrome metabólico, así como niveles altos de triglicéridos o colesterol LDL (llamado colesterol malo), o resistencia a la insulina.

Obesidad.

Obesidad es un factor de riesgo para desarrollar hígado graso no alcohólico.

Con motivo del Día Internacional de la Enfermedad por Hígado Graso no Alcohólico (EHGNA), que se conmemora el 12 de junio, la doctora Rosalba Moreno Alcántar, presidenta de la Asociación Mexicana de Hepatología (AHM) y jefa de Gastroenterología del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional Siglo XXI, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), dijo que en las últimas dos décadas este problema de salud pública se ha cuadruplicado en el país, y es una condición a la que hay que tener especial atención, ya que también afecta a personas delgadas, “el 25% de las personas con hígado graso no alcohólico son delgadas.

HASTA 10 AÑOS VIVIENDO CON HÍGADO GRASO, SIN TENER MOLESTIAS

En este sentido, el doctor José Antonio Velarde Ruiz Velasco, jefe del Servicio de Gastroenterología del antiguo Hospital Civil de Guadalajara “Fray Antonio Alcalde”, enfermedad de hígado graso no alcohólico, el grave problema es que es asintomática, y silenciosa.

Se pueden vivir hasta 20 años con esta condición, ya que sólo se presentan molestias como: cansancio y molestia en el lado superior derecho del abdomen, pero cuando la persona tiene ictericia -color amarillo de la piel-, e inflamación es cuando la enfermedad ya está en etapa avanzada, con lo que, probablemente, un adolescente de 15 años con hígado graso no alcohólico, cuando cumpla los 40 va a tener cirrosis.

Ante este panorama, la doctora Eira Cerda Reyes, tesorera de la Asociación Mexicana de Hepatología, sostuvo que medidas preventivas para verificar el estado de nuestro hígado, se hacen necesarias como una prueba en sangre y estudios de imagen como un ultrasonido hepático para detectar irregularidades en la función del hígado, o si hay grasa en el tejido hepático superior a 5%, y hacer cambios en el estilo de vida, a fin de reducir los factores de riesgo que pongan en peligro este importante órgano.

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VIDA SANA: DIETA BALANCEADA, ACTIVIDAD FÍSICA AL MENOS 5B DÍAS A LA SEMANA Y CHEQUEOS MÉDICOS

Las y los médicos especialistas, coincidieron en la necesidad de que las personas se informen respecto a este padecimiento, a fin de que inicien cambios en los hábitos de vida, por estilos más saludables con una dieta bien balanceada, evitar la comida rápida, así como los conservadores, vigilar el peso corporal, y procurar que se encuentre dentro del rango de lo que medimos es decir, si es 1.50 centímetros, contemplar sólo dos o tres kilos por encima de esos 50, es decir, pesar 52 ó 53 kilos, así como procurar hacerse pruebas de funcionamiento hepático y si los rangos están por encima de lo normal, acudir con el médico especialista para adoptar medidas preventivas, antes de evolucionar a cirrosis.