México pide a CELAC endosar demanda por allanamiento a su embajada en Ecuador
La canciller Alicia Bárcena advirtió que se debe sentar un precedente para que nunca se repita algo similar en ningún país
La canciller Alicia Bárcena dirige un mensaje a los países miembros de la CELAC por el caso del allanamiento a la embajada de México en Ecuador, por las fuerzas del orden
La titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Alicia Bárcena exhortó a los estados miembros de la CELAC a endosar la demanda que México presentará ante la Corte Internacional de Justicia, así como la carta al secretario general de las Naciones Unidas, ante el allanamiento de la embajada mexicana en Ecuador.
“Hemos presenciado la brutal e injustificada envestida contra nuestra embajada, por parte de fuerzas especiales de Ecuador y también contra nuestro diplomático Roberto Canseco, contra mi país y contra nuestra integración regional”.
“En este penoso caso -pidió-, no dar espacios para el titubeo, estos hechos deben ser condenados internacionalmente para salvaguardar las leyes que rigen a los países, el comportamiento del gobierno de Ecuador fue desproporcionado y no puede sentar precedente".
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Señaló lo anterior, luego de que presentó un video en donde se observan a las fuerzas policiacas de Ecuador cuando ingresan a la embajada mexicana en aquel país y la manera como someten al jefe de cancillería de nuestra embajada Roberto Canseco”.
Así lo estableció al dirigir un mensaje, en una reunión extraordinaria de ministras y ministros de relaciones exteriores, de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), ante quienes señaló que las aberrantes imágenes de violencia, abuso y sometimiento “quedará para siempre plasmado en la historia”.
Ese ultraje, sostuvo, no tiene precedentes en la historia de la región, ni en los peores momentos, ni en los momentos más oscuros de una violación tan clara a las normas más básicas de convivencia diplomática, ni en las peores dictaduras”, hechos con los que se cruzó un umbral muy peligroso.
La encargada de la política exterior del país enfatizó que la CELAC tiene una gran responsabilidad “y la obligación de demostrar a la comunidad internacional que los quebrantos al derecho internacional son inaceptables, pero sobre todo que tienen consecuencias”.
Asimismo, enfatizó que México respalda la propuesta de la Presidencia Pro tempore de Honduras “de convocar a una reunión extraordinaria de jefas y jefes de Estado y de gobierno, ya que esta acción requiere una voz firme y unida en defensa del derecho internacional y de las reglas más básicas de convivencia entre nuestros países.
“Es el momento de tener una CELAC unida, una CELAC defensora de las normas internacionales, defensora de las normas de sus más grandes tradiciones jurídicas más arraigadas, incluyendo que somos una zona de paz. Una CELAC que vele por el buen presente y el bien del futuro de todos nuestros pueblos”, estableció.
La canciller insistió en que el asalto a las instalaciones de la embajada de México en Ecuador, constituye una flagrante violación al artículo 22 de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas de 1971, específicamente sobre la inviolabilidad de las representaciones diplomáticas.
Y puntualizó que ni en el Artículo 22, ni en ningún otro Artículo de la Convención “establecen excepción alguna al principio de inviolabilidad por eso la obligación de los estados receptores de proteger los locales de la misión prevalece en todo momento”.
La secretaria Alicia Bárcena insistió en el rompimiento de relaciones diplomáticas y consulares luego de tales hechos violatorios del derecho internacional y de las reglas básicas de convivencia internacionales.
Respecto a los argumentos de Ecuador en el sentido de que México habría abusado de las inmunidades diplomáticas al resguardar a un “delincuente común”, la canciller rechazó contundentemente tales dichos e insistió que en el caso del exvicepresidente Jorge Glas, “nuestro país ciñó en todo momento su actuación al derecho internacional en materia de asilo diplomático con lo que el resguardo del vicepresidente y el otorgamiento de asilo político constituyen actos lícitos”.
Confirmó además que el ingreso de Glas a la embajada de México, en Quito “se realizó en estricto apego a derecho internacional aplicable a la convención de asilo diplomático adoptada en Caracas en 1954”, y a partir de ese momento se actuó con total transparencia y honestidad frente a las autoridades de Ecuador, manteniendo un diálogo “de buena fe con el ministerio de relaciones exteriores para informarles sobre esta situación en todo momento”.
“Se utilizaron todos los canales conducentes, se actuó bajo el principio cardinal de solución pacífica de controversias, México estudió minuciosamente la información provista por las autoridades ecuatorianas para evaluar las solicitudes de asilo político del señor Glas”, y en base a ello se determinó que había los suficientes elementos para otorgar el asilo político y como lo establece el derecho internacional aplicable dicha decisión debió ser respetada.
La funcionaria planteó que, si la preocupación del gobierno ecuatoriano era en el sentido de que hubiera habido una situación de impunidad, debió entregar “el salvoconducto y formular una reserva de extradición”, inclusive si se tenía una interpretación diferente a la de México, respecto a las convenciones de asilo o a la convención de Viena sobre relaciones diplomáticas
Incluso, en el caso de no haber llegado a un acuerdo, Ecuador pudo haber remitido la disputa a instancias interamericanas e internacionales, y contrario a ello se optó por irrumpir ilegal y violentamente contra la embajada, local protegido por el derecho internacional.
“Con su actuación el gobierno de Ecuador no solo violó flagrantemente la convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, sino que contravino una de las instituciones jurídicas más importantes y sólidas de América latina y el Caribe como lo es el asilo institución que, además, lo han reconocido la comunidad internacional en diversos instrumentos”.