Prevención: hemorragias obstétricas ocasionadas por hemofilia
Con los tratamientos adecuados, este riesgo se puede controlar y evitar el peligro de muerte durante el parto
Salud
Algunas mujeres pueden desarrollar enfermedad de la coagulación de la sangre cuando están embarazadas
En la actualidad la hemorragia postparto sigue siendo la principal causa de muerte en México y a nivel mundial y de manera particular en este tipo de eventos, se presenta una situación de suma importancia, debido a que dentro de las causas de muerte materna, está una de forma específica en la que se incluyen todas las enfermedades de la coagulación de la sangre, que es en lo que menos se piensa cuando, durante el parto hay una hemorragia.
Al respecto, la doctora Marilyn Mendoza especialista en hematología, en entrevista con Crónica, señaló que en particular a las mujeres con enfermedades de la coagulación de la sangre, el riesgo es que no sepan que viven con esta condición, o que no la tienen y se presenta al momento del parto con una hemorragia que les puede costar la vida.
La doctora Marilyn Mendoza, especialista en hematología
“Esta enfermedad es en lo que menos se piensa cuando un médico está atendiendo una hemorragia posparto, entonces muchas de las muertes podrían ser por trastornos de coagulación que no fueron detectados, porque muchos médicos no la piensan, no la sospechan y en consecuencia no la diagnostican”.
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LAS DOS HEMOFILIAS: LA CONGÉNITA Y LA ADQUIRIDA
Al respecto, detalló que hay dos espectros de mujeres portadoras de hemofilia: la congénita, que nacen con este problema de coagulación en la sangre por un problema en uno de los factores, en la cual, están en riesgo de sangrar, pero si no han tenido hijos quizá no sepan que son portadoras de la enfermedad.
También están aquellas mujeres que pueden desarrollar enfermedad de la coagulación de la sangre, cuando están embarazadas, casos alarmantes, porque son mujeres que no saben que pueden tener algo en su sangre que puede llevarlas a sangrar de manera importante durante el parto o una intervención quirúrgica.
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La especialista en hematología y asesora científica del Área de Enfermedades Raras de Novo Nordisk, recordó que las mujeres que son portadoras de la hemofilia heredan esta mutación a sus hijos varones. “La mujer como tal no tiene la enfermedad pero su coagulación tampoco funciona bien y se puede reflejar en sangrados abundantes durante periodos largos en la menstruación, o más de una vez al mes, o riesgos de sangrados también durante una operación o un parto”.
Otra condición importante son las enfermedades adquiridas de la coagulación, es decir, que mujeres normales que cuando cursan por un embarazo, al momento del parto comienzan a sangrar de manera masiva, que puede ser por hemofilia adquirida y en estos casos se cree que el factor desencadenante de este trastorno en la coagulación es el propio embarazo, aunque durante toda la gestación no presentan síntomas, sino hasta el momento del parto o cesárea la mujer va a desarrollar la enfermedad como tal con sangrados importantes.
UN PROBLEMA, EN EL QUE POCO SE PIENSA
Ante esto, señaló la doctora Marilyn Mendoza, que los médicos regularmente no piensan “en un trastorno en la coagulación y presumen trastornos del útero, retención de la placenta o buscan alguna lesión en el canal del parto o en el canal vaginal y en lo que se distraen en esto no se le pone atención a lo que podría ser una enfermedad de la coagulación la cual pasa desapercibida y es cuando muchas veces mueren las madres, porque no se sospecha o no se tiene conocimiento de estos problemas en la sangre y que se complican durante el parto”.
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Una de las excelentes noticias, dijo, para todas las mujeres con trastornos en la coagulación, es que hay tratamientos específicos que permiten evitar estos sangrados masivos, ya que hasta un uno por ciento de los casos de hemorragia postparto van a ser por trastornos en la coagulación, lo cual es dramático, porque estamos hablando de vidas, de una madre o un bebé que mueren y son vidas extremadamente valiosas.
Estas muertes son prevenibles si se diagnostican a tiempo y se les prescribe el tratamiento adecuado, y la mejor noticia es que cuando se trata de enfermedades adquiridas estas son curables.
EL CONTROL PRENATAL, OBLIGA UNA BIOMETRÍA HEMÁTICA
La especialista sostuvo que lo fundamental para las mujeres que ya están embarazadas es llevar su control prenatal con un ginecólogo o el médico general y hacerse pruebas básicas de sangre las cuales son accesibles y bastante económicas como: biometría hemática, revisar hemoglobina y plaquetas para ver si no hay anemia o no y en casos severos iniciar un adecuado abordaje.
Una segunda prueba es evaluar el tiempo de coagulación de la sangre, lo cual permite identificar si hay una enfermedad de la coagulación, y si desde el inicio se detecta que la prueba de coagulación no salió en parámetros normales, entonces interviene el hematólogo quien se encargará de prescribir el tratamiento adecuado antes del parto y así evitar el riesgo de un sangrado excesivo.
Al respecto, la hematóloga Marilyn Mendoza enfatizó que en México ya se cuenta con los tratamientos adecuados para atender a estas pacientes, aunque no están siendo detectadas y no están siendo diagnosticadas a tiempo.
Hay factores de riesgo, mencionó, que deben tomarse en cuenta para acudir a un especialista, cuando aparecen moretones sin que haya habido un golpe, es señal de que la coagulación pudiera estar fallando, quienes sangran de la nariz, pero como no se trata de una situación que amerite hospitalización no se le da mayor importancia, cuando hay sangrados posteriores a procedimientos dentales que duran varios días, en las mujeres menstruaciones abundantes hasta por 7 días o dos veces al mes, lo cual, de ninguna manera puede ser normal, hay que acudir al hematólogo para iniciar estudios y tratamiento adecuado y que además han demostrado una alta efectividad, con el factor que le haga falta en la sangre, puede 7 u 8, o enfermedad de Von Willebrand otra enfermedad frecuente en México.
Ante este panorama, la doctora Marilyn se pronunció porque las pacientes sean más proactivas y “pierdan el miedo a preguntar a sus médicos todo lo concerniente con su salud, saber cómo salieron sus estudios de laboratorios, si están bien o no y ello qué implica, es decir que se atrevan a aclarar todas sus dudas y perder el miedo a preguntar y si no entienden volver a preguntar, porque a final de cuentas es su vida de la que estamos hablando”.
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