
Por tercera vez consecutiva, el Banco de México (Banxico) redujo su tasa de interés interbancaria en 50 puntos base, para dejarla en 8.5 por ciento, al considerar que el “episodio inflacionario” ya quedó atrás.
La decisión, aprobada por unanimidad por la Junta de Gobierno es el séptimo recorte consecutivo desde agosto del 2024, ante mejores pronósticos inflacionarios.
El Banco de México mantuvo su pronóstico sobre una inflación general promedio del 3.3 por ciento para el último trimestre de 2025 y advirtió que “se mantiene sesgado al alza” el balance de riesgos respecto de la trayectoria prevista para la inflación, pese a la imposición de aranceles de Estados Unidos a productos mexicanos y a la guerra comercial entre Washington y Pekín.
Asimismo, reconoció que, “ante las tensiones” comerciales por la guerra arancelaria “las perspectivas económicas globales y las de Estados Unidos en particular se han revisado a la baja”.
Tanto la inflación general como la subyacente (precios de alimentos no elaborados (frutas o verduras), energía (gas, luz, etc.) y el combustible, se ubicaron en 3.93% en abril pasado . La inflación del componente subyacente acumuló ocho meses consecutivos por debajo de 4%, aunque se incrementó en el margen. Las expectativas de inflación general para el cierre de 2025 aumentaron.
Las de mayor plazo permanecieron relativamente estables en niveles por encima de la meta. Los pronósticos de inflación se ajustaron al alza en el corto plazo, en buena medida debido a un incremento mayor al anticipado en la inflación de las mercancías. Se espera que la inflación general converja con la meta en el tercer trimestre de 2026.
Banxico destaca que las acciones que se implementen serán tales que la tasa de referencia sea congruente, en todo momento, con la trayectoria requerida para propiciar la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3% en el plazo previsto. El Banco Central reafirma su compromiso con su mandato prioritario y la necesidad de perseverar en sus esfuerzos por consolidar un entorno de inflación baja y estable.