“Hacemos un llamado para que (en el Senado) pueda revisarse el dictamen, se corrija y regrese a la Cámara de Diputados, para que quede listo a finales de este mes”, expresó Gustavo de Hoyos.
Asimismo, refirió que con estos cambios la autoridad respectiva necesitará de 60 días para evaluar el origen de una huelga, lo que afecta de manera directa en la productividad laboral.
Gustavo de Hoyos fue certero y subrayó que “el derecho a sindicalización y huelga de los trabajadores no está contemplado en la iniciativa de la reforma laboral, lo que incita a una supersindicalización del país para erradicar las relaciones obrero-patronales”.
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