El secretario de Desarrollo Sustentable, Roberto Russildi, se reunió con representantes de unas 30 pedreras de Nuevo León para informarles los procedimientos legales y operativos a seguir tras la suspensión de sus actividades contaminantes.
Russildi explicó a los asistentes las reglas que las empresas extractoras de caliza deberán cumplir para cesar sus actividades contaminantes, así como el procedimiento jurídico que deberán seguir para acreditar el cumplimiento.
En la reunión, las empresas pudieron resolver, en un diálogo abierto, sus dudas con especialistas de desarrollo sustentable.
“El criterio que vamos a seguir es el de eliminar los riesgos de afectación a la salud que provoca esta actividad en la población”, dijo el secretario durante la reunión con los representantes de las empresas sujetas a suspensión.
“Lo haremos a través del control de las emisiones, especialmente de las partículas suspendidas que causan graves problemas respiratorios en las personas expuestas.
“Solo podrán operar aquellas empresas que cumplan completamente con ese criterio”.
De manera inmediata, explicó el secretario, las pedreras deberán controlar sus actividades y, a corto plazo, presentar su plan de regularización acorde a las normas ambientales.
Russildi confió en el resto de las empresas tendrá un acercamiento con la autoridad en los próximos días.
Añadió que sostendrán reuniones individuales con cada establecimiento para hacer el seguimiento caso por caso, en un diálogo de carácter técnico y no de negociación.
El secretario advirtió que los operativos contra la contaminación de las pedreras no serán las únicas acciones que se emprenderán para mejorar la calidad del aire que respiran los ciudadanos de Nuevo León, pues próximamente emprenderán medidas contra otras fuentes de emisiones dañinas.
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