Metrópoli

El pequeño Tepito bravo de Santiago Tlatelolco

Las clases de boxeo empiezan a partir de las 8 de la mañana en el Jardín Botánico de Santiago Tlatelolco

Mujer boxeadora golpea a hombre en el parque
Mujer boxeadora golpea a hombre en el parque Mujer boxeadora golpea a hombre en el parque (La Crónica de Hoy)

Las clases de boxeo empiezan a partir de las 8 de la mañana en el Jardín Botánico de Santiago Tlatelolco. El instructor Luis espera la llegada de alumnos a los amplios andadores, especialmente a los que vienen desde el cercano barrio de Tepito.

“Todos saben cómo es ahí; hay que saber defenderse”, dice este hombre entrado en años, el guía de algunos jóvenes y adultos en saberes boxísticos. “La señora que vende dulces en la esquina, por ejemplo, viene nada más para andar activa, pero todos ya saben que puede pelear”, comenta.

También hay quienes simplemente desean estar en forma. “Yo soy de acá, de Tepito, pero vengo nada más a hacer ejercicio. Mi hermano me recomendó al profesor Luis”, comenta Mirza mientras práctica su bending, con movimientos rápidos de cintura y cabeceo, pasando de un lado a otro de la cuerda que su instructor ha tendido entre dos árboles.

El box es parte de las actividades matutinas de este jardín urbano cuya historia general data del siglo XVI, su incorporación al mundo urbano moderno pasó por las manos del Regente de Hierro, Ernesto Uruchurtu, y fue remodelado apenas en 2015.

Los andadores, los espacios entre árbol y árbol, son ahora un gimnasio al aire libre con entrenamiento personalizado: “Yo he ido a gimnasios, pero es el profesor Luis el que me dice en qué estoy mal; me corrige la técnica y así, cuando voy a las peleas reales, me muevo bien”, dice Bernardo, quien ya tiene en su haber peleas que se organizan en el Mercado de Granaditas y en las que gana algún dinero.

La mayor parte de los instruidos en Tlatelolco permanecen en el orden amateur. El propio Luis cobra sólo 30 pesos a cada alumno, que se gastan en vendas, agua y cuerdas.

Es esta la pequeña incrustación del barrio bravo en Tlatelolco.

A las 11 de la mañana de cada día, las áreas verdes de la unidad habitacional ganan en actividad vecinal. En uno de sus puntos, los árboles continúan tornándose oponentes, los postes de las farolas marcan la vertical sobre la que se depuran las técnicas boxísticas y el quiosco cercano, representativo del lugar, es habilitado como ring ocasional.

Es un día más de box en Santiago Tlatelolco.

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