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Un jurado de la ciudad de Boston exoneró al exjugador del equipo de futbol americano Patriotas de Nueva Inglaterra, Aaron Hernández, del asesinato de dos hombres en 2012, pese a lo cual, el acusado deberá permanecer en prisión por otro crimen por el que ya fue sentenciado.
Tras una deliberación de 37 horas, el jurado anunció este viernes la exoneración de Hernández de siete cargos que se le imputaron, mientras que sólo lo encontraron culpable por la posesión ilegal de un arma de fuego.
Hernández, de 27 años, fue acusado de matar a Daniel de Abreu y Safiro Furtado, unos inmigrantes de Cabo Verde, en un tiroteo ocurrido en julio de 2012 afuera de un centro nocturno de Boston, capital del estado de Massachusetts.
La fiscalía sostuvo que Hernández disparó a las dos víctimas en su automóvil, luego que uno de los hombres chocó con él dentro del centro nocturno, lo que causó que el exjugador derramara su bebida.
El abogado defensor de Hernández indicó que la persona que asesinó a Furtado y De Abreu fue Alexander Bradley, quien acompañaba al exjugador y que ha sido identificado por las autoridades como distribuidor de drogas.
El equipo de la defensa señaló que el asesinato se debió a una transacción fallida entre Bradley y las dos víctimas.
El jurado también exoneró a Hernández del cargo que apuntaba que el exjugador le disparó a Bradley meses después del doble asesinato, a fin de asegurar su silencio como testigo en el caso. El hombre sobrevivió al disparo, aunque perdió el ojo derecho.
Hernández permanecerá sin embargo en la cárcel debido a que hace dos años fue condenado a cadena perpetua sin posibilidad de fianza por el asesinato en 2013 del jugador semiprofesional de futbol americano, Odin Lloyd.
havh
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