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Rescatar el lado humano de Maximiliano de Habsburgo es el objetivo central de la obra de teatro Imperio, en la cual el emperador, durante los últimos tres días de su vida, expone sus circunstancias y busca quitarse las etiquetas de bueno o malo.
Se trata de una adaptación teatral de la novela homónima de Héctor Zagal, dirigida y adaptada por Rodrigo González, que iniciará una cuarta temporada en el Alcázar del Castillo de Chapultepec a partir hoy.
En entrevista, el adaptador de la novela comentó que el libro lo atrapó no sólo por tener situaciones teatrales, sino porque presenta aspectos de la naturaleza del segundo emperador de México, para tratar de entenderlo.
“Tenemos a un Maximiliano que está a punto de ser pasado por las armas, entonces se mete a esta reflexión sobre lo que ha sido de su vida, lo bueno y lo malo; mostramos además políticas que defendió”, destacó el dramaturgo.
Entre éstos, está la defensa de Maximiliano por la propiedad privada, la creación del grito de independencia y del traje de charro, por mencionar algunos ejemplos.
De esta manera se presenta a un hombre que reflexiona sobre su vida, por lo que al hacer su introspección atraviesa diferentes estados de ánimo: “vemos a un Maximiliano majestuoso, pero al mismo tiempo caído y enfermo”.
Imperio inicia hoy con una función a las 20:00 horas y después estará los sábados a las 20:00 horas y domingos a las 19:00 horas. Costo: 300 pesos
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