Tras la agresión a golpes y el disparo de un arma de fuego contra dos jóvenes vecinos de Ciudad Satélite, de parte de dos policías de Seguridad Ciudadana y Tránsito de Naucalpan, y que se difundió a través de un video en redes sociales, el gobierno municipal informó que la Comisión de Honor y Justicia realiza una investigación y advirtió que “no se solaparán abusos de autoridad”.
Por medio de un comunicado de prensa, el alcalde panista de Naucalpan, Edgar Olvera Higuera, aseguró que en su gobierno no se permiten ni se solapan actos de corrupción o abusos de autoridad, por lo que en éste y todos los casos se realizarán las investigaciones correspondientes y se aplicará la sanción conforme a derecho.
Sostuvo que los dos elementos de la policía presuntamente involucrados, Antonio Almazán Zaragoza y Héctor González Martínez, están sujetos a procedimiento ante la Comisión de Honor y Justicia para deslindar responsabilidades, que podrían llegar a una sanción e incluso a la separación del cargo. Sin embargo, hasta el pasado jueves, no existe denuncia formal de los afectados por las lesiones que sufrieron, informaron fuentes oficiales de Naucalpan.
Autoridades señalaron que el video que se viralizó hace unos días en redes sociales, donde presuntamente se observa un incidente entre dos jóvenes de Satélite y los policías Almazán Zaragoza y González Martínez, quienes los golpearon y balearon, se confirmó que hasta el momento “se informa que no se ha presentado ninguna denuncia al respecto, así como no se ha comprobado que los uniformados hayan causado lesiones al civil”.
No obstante, ante la Comisión de Honor y Justicia se inició un procedimiento, toda vez que el video muestra que los elementos sacaron su arma de cargo sin aparente justificación, violando el Protocolo de Actuación Policial.
Los hechos ocurrieron el pasado domingo 9 de octubre en la madrugada cuando los jóvenes circulaban sobre el Circuito Historiadores, casi esquina con Gustavo Baz, en Ciudad Satélite, y policías de Naucalpan les marcaron el alto. Los jóvenes grabaron la detención, lo que no fue del agrado de los uniformados municipales, quienes pidieron les entregaran la grabación.
Al negarse, uno de los jóvenes fue agredido para exigirle que borrara el video, en cuyo audio se escucha una detonación y la angustia de los detenidos.
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