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Como parte del Tour Orgullo Mexicano, Paco de María se presentó la noche del 24 de noviembre en Lunario del Auditorio Nacional para unir el jazz y el mariachi.
El bullicio de las triviales conversaciones se vio consumido por la oscuridad, a la expectativa de que Paco de María saliera al escenario. 11 músicos pulcramente arreglados con trajes negros, moños en el cuello e instrumentos en las manos, se distribuyeron en el escenario a la espera de la voz de la Big Band.
Del fondo emanaba la suave melodía del teclado, la agitación del público se manifiestaba en aplausos y murmullos, que se convirtieron en gritos.“Mira si estoy loco por tu amor…”, fueron las primeras palabras del artista.
Se encendieron las luces, la atmosfera y el escenario, con su especial andar y acentuados movimientos al ritmo de la música de “Preso”, conocidísima pieza del cantante José José. “Vamos a decirnos la verdad, tú te aprovechas de mí y yo te amo...”, se escucha con la extraordinaria voz.
Apenas un par de minutos en silencio y luego, al ritmo de los aplausos se escuchó “¿Quién será la que me quiera a mí, quién será, quién será?”, al concluir la oración, algunas voces del publico contestaron “Yo”, con indescriptible entusiasmo. Escrita en 1953 por Pablo Beltrán Ruiz y Luis Demetrio, “¿Quién será?” comenzó a sonar con el particular estilo de Paco de María y su Big Band.
Los reflectores que en un principio iluminaron únicamente al cantante, se tornaron en tonos azules, imágenes de montañas hermosamente cubiertas de blanco y aves sobrevolando los alrededores, sucedieron a los colores rítmicos de las dos pantallas ubicadas a espaldas de los músicos, para dar paso a “Come fly with me” y casi de manera imperceptible y sin interrupción, continúo “Fly me to the moon”, originalmente interpretada por Frank Sinatra.
Durante esta última canción, el cantante bajó del escenario para acercarse al público y decir de un manera lo suficientemente sugerente, pero respetuosa, “Kiss me baby”.
“De verdad, la oportunidad que ustedes me dan de estar aquí parado, de hacer lo que más me gusta… ¡que fortuna, que bendición! Estoy muy agradecido con Dios, con ustedes, con mi familia, por inculcarme la buena música desde niño; pero sobre todo estoy agradecido por poder hacer esto que me hace sentir bien”, expresó momentos antes de interpretar “Medley” y “Feling good”.
“Enamórate”, canción que le fue regalada por Juan Gabriel, fue especialmente dedicada a Fernando Romero, mejor conocido como El Abuelo, quien el pasado viernes fue sometido a una delicada operación, por lo que no pudo estar presente esta noche, según comenta el artista.
Recayó la oscuridad de nueva cuenta, sucedida por los reflectores perfectamente coordinados que se batieron entre colores rosas y rojos, mientras que en el fondo se podían apreciar diversas fotos del Divo de Juárez.
“Te quiero”, “Dijiste” y “Perfidia”, procedieron. Cada una de las canciones tanto o más conocida que la anterior, creó un ambiente íntimo y cercano con el público, como en los casos de “Recipe for love” y “Can´t take my eyes off you”.
Paco de María obsequió tres rosas a algunas mujeres que se encontraban entre el público. “Granada” fue la última canción, antes de dar la bienvenida al verdadero Orgullo Mexicano.
De uno en uno entró el Mariachi Camperos de México y el público estalló en gritos y silbidos. Tras unos minutos de ausencia el cantante salió al escenario con un traje de mariachi negro, que hacía un contraste perfecto con el beige del resto de los músicos que se encontraban en el escenario y en ese momento, todo se pinta tricolor.
“Soy puro mexicano”, “Te sigo amando”, “Acá entre nos” y “Secreto de amor”, fueron algunas de las canciones que interpretó la compañía, la cual incluso amenizó las canciones con un ligero tambaleo “izquierda-derecha” a manera de baile.
Paco de María aprovechó para regalar dos de las prendas que conformaban su nuevo atuendo, provocando un escándalo entre las mujeres del público, que a decir verdad, esperaron desde el comienzo de la noche.
Aproximadamente a un mes de Navidad, aprovechó la ocasión para iniciar las fiestas con “Have your self a merry little Christmas”, la cual sonó mientras una sorpresiva nieve artificial cayó de la parte superior del Lunario.
Pero la mayor sorpresa fue la aparición de Santa Claus con una bolsa de regalos, la cual con ayuda del cantante, repartió a algunos pocos del público para finalizar la noche, no sin antes agradecer al público por su asistencia y entrega.
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