El sector turístico aporta casi el 9 por ciento del PIB nacional y emplea a 5 millones de personas. Es el principal empleador de mujeres y jóvenes. El año pasado el país captó 33 mil millones de dólares por concepto de gasto de los 45 millones de turistas internacionales que nos visitaron. A pesar de estas cifras descomunales, la bibliografía sobre el turismo en México es escasa en extremo.
Hay, desde luego, trabajos académicos de circulación restringida, pero es casi imposible encontrar en los mostradores de las librerías textos que aborden el tema del turismo, su historia, los momentos relevantes, sus proyecciones. Es un vacío inadmisible, ya que se trata de una de las principales actividades económicas en el país que además de generar empleo y divisas frescas todos los días y todas las noches, ha mostrado ser eficaz para combatir la pobreza y detonar desarrollo.
Miguel Torruco Marqués hace una contribución importante para subsanar este vacío con la publicación de su libro “Historia Institucional del Turismo en México, 1026-2024. La Secretaría de Turismo sus Titulares”, que fue presentado esta semana durante una comida en céntrico hotel de la Ciudad de México. El libro aporta datos básicos de conocimiento indispensable para los estudiantes de turismo, como la historia de la Sectur y los nombres y logros de sus titulares.
Cuenta con un prólogo de Zurab Pololikashvili, todavía, secretario general de la ONU-Turismo. Oriundo de Georgia, Zurab afirma que el turismo se ha consolidado en el mundo como un poderoso motor económico generador de divisas, empleo e inversión. Al igual que la actividad turística se ha transformado a lo largo de los años, las instituciones de cada país también se han tenido que ir adaptando a las nuevas realidades.
Torruco ha sido al mismo tiempo testigo y protagonista de estos cambios en México. El libro es su relato personal de la transformación que ha permito a nuestro país convertirse en una potencia mundial, pero todavía con mucho camino por recorrer. Las áreas de oportunidad en materia de turismo son enormes. El libro está escrito de manera sencilla y accesible que facilita la comprensión para estudiantes y para aquellos no avezados en turismo pero que están interesados en acercarse a la industria sin chimeneas.
No extraña que el autor dedique un amplio apartado de su libro a reseñar los logros de su gestión al frente de la Sectur durante el sexenio de AMLO. Torruco hizo más con menos, mucho menos presupuesto que en otras administraciones y por su fuera poco tuvo que sortear el golpe de la pandemia del Covid 19 que fue devastador para la industria. A pesar de todo eso se entregaron buenas cuentas y el autor las deja por escrito.
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El libro es, a la vez, una aportación didáctica muy útil, un alegato político a favor de lo que conoce como Cuarta Transformación y un resumen de una vida dedicada a la causa del turismo en el país en diferentes frentes, el público, el académico y el empresarial.
Como colofón del texto, Torruco, viendo al futuro, se refiere a la irrupción en el turismo de las nuevas tecnologías que impactan de manera decisiva a la actividad. El turismo de base digital ya está entre nosotros y llegó para quedarse. Es clave para afrontar lo que viene que el sector se adapte a la nueva era digital que puede ser el gran aliado que el país necesita para crecer más rápido y repartir mejor los beneficios. Hay que dominar herramientas como la realidad aumentada, la inteligencia artificial y el Big Data, entre otros. Ahí está el presente y sobre todo el futuro de la industria.
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