
La violencia alrededor de la CNTE no tiene sentido. Son provocaciones burdas, ruines, que muestran la verdadera cara de un sector de la Coordinadora que va por cambios usando la violencia.
El ataque de ayer al Palacio de Cobián, sede de las oficinas de la Secretaría de Gobernación, pudo ocasionar una tragedia. Aunque usted no lo crea los activistas de la CNTE estaban invitados a seguir con las negociaciones en el despacho de Rosa Icela Rodríguez, podrían entrar por la puerta principal sin destruir nada. Sin embargo, está en su naturaleza usar la vía violenta y por eso intentaron el portazo.
Atacar el lugar donde habrá las conversaciones y después acusar al gobierno por falta de diálogo es propio de lunáticos y muestra que al interior de la CNTE impera el caos.
Cadena de custodia
Desde su complejo diseño la elección del Poder Judicial tuvo puntos brumosos en la cadena de custodia de los votos. Reforzar la cadena era una de las responsabilidades del instituto electoral.
Las consejeras electorales Claudia Zavala y Carla Humphrey parecen no entender que lo que publican en redes sociales queda registrado. Fueron las primeras en atentar contra la cadena al tomarse fotografías y videos dentro de las bodegas de los distritos electorales, donde se resguardan las boletas de la elección del poder judicial.
¿Acaso olvidaron que, para estar ahí, el consejo distrital debe sesionar y autorizar su presencia? Hacen cosas buenas que parecen malas o toman a la ligera asuntos importantes. ¿Les gustaron sus fotos?
De acero y aluminio
No podemos sentarnos y dejar que Trump nos atropelle, dijo el gobierno con respecto a la decisión de la Casa Blanca de elevar a 50 por ciento los impuestos al acero y al aluminio. Fue el gobierno de Canadá quien lo dijo.
El gobierno mexicano ha dicho que la decisión no tiene sustento legal pero todavía no dice si habrá respuesta o no. No caeremos en el ojo por ojo, se dijo en Palacio Nacional. Suena bien, pero lo único que México no puede hacer el país es poner la otra mejilla. Eso no. Hay que responder de alguna manera.
Buscar una reunión con el premier de Canadá o conversar con los líderes americanos del sector que tampoco quieren una guerra. Los efectos negativos de los mega aranceles ya comienzan a sentirse en la industria de Estados Unidos. Ellos, empresarios y trabajadores de sectores claves como el automotriz o la construcción, pueden ser nuestros inesperados aliados. Hay que buscarlos.
Ex militares colombianos
México genera demasiados delincuentes, lo que menos se necesita son malandros foráneos.
Países que se llenan la boca con halagos y reconocimientos a México por su invariable solidaridad, le han pagado mal al país. Venezuela y Colombia no se toman la molestia de informar a México sobre la salida de delincuentes conocidos que vienen a operar a México.
Once exmilitares colombianos fueron detenidos en México como responsables de colocar minas que les costaron la vida a ocho soldados mexicanos en Los Reyes, Michoacán. No son los primeros extranjeros detenidos ni serán los últimos porque hay más entre nosotros llevando una vida criminal en la impunidad.
¿Exmilitares colombianos aliados de los carteles mexicanos? Tal parece que el gobierno colombiano está cómodo con librarse de los criminales que vienen a matar a México. Se necesita mucho más que condolencias, se necesita compartir información de inteligencia en tiempo real, asumir su corresponsabilidad. Menos flores y más acciones concretas.