Opinión

¡México ya calificó para el Mundial 2026!

Hasta nunca Qatar. - El Tata Martino concluye esta semana instalado, con merecimientos, en la lista negra de villanos nacionales, junto a personajes de la ralea de Catalina Creel o Arjen Robben, el consumado actor del área chica que fingió con maestría un penal que nos eliminó del Mundial de Brasil, que dio la oportunidad de repetir la cantaleta: “jugamos como nunca, perdimos como siempre”.

Chucky Lozano dio su mejor partido ante Arabia Saudita

Chucky Lozano dio su mejor partido ante Arabia Saudita

Cuartoscuro

Ahora que estamos tan dolidos por la eliminación en Qatar, habrá que recordar que los mundiales han dejado muchas más decepciones que alegrías. Nunca el equipo mexicano ha jugado un quinto partido. Con regularidad llegamos al cuarto, uno más que ahora, pero hasta ahí.

El Mundial atrae a millones de espectadores que nunca ven los partidos de la liga mexicana. Están en su derecho, quieren echar relajo, pasársela bien un par de horas con la familia y los amigos, pero si hubieran seguido el campeonato local en el que cualquier equipo, aunque quede en el doceavo lugar, puede ser campeón, y si hubieran visto los juegos eliminatorios de la selección en la región de Concacaf, el pobre desempeño del equipo en Qatar no los hubiera tomado por sorpresa. Se veía venir.

La Selección ha jugando mal, francamente mal, desde más de hace un año. Siguió esa línea en Qatar salvo algunos momentos del partido contra Arabia Saudita. A pesar del mal juego, el equipo estuvo cerca, a un gol, de calificar y eso les ha servido a los directivos para justificar su puesto. Solo nos faltó un gol, dicen, lavándose las manos de un proceso fallido. México llegó mal al Mundial, pero la verdad es que los equipos que tocó enfrentar no llegaron mejor, Polonia y Arabia son de medio pelo y Argentina no brilla, lo que aumenta el coraje.

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El equipo del Tata nos dio dos alegrías, el penal que le paró Ochoa a Lewandowski y la anotación de tiro de castigo de Luis Gerardo Chávez contra Arabia. Fuera de eso poco, casi nada. Lo que más aprecio es que en el último partido hubo garra y ganas de ganar, por lo menos morimos de algo. El titular de Crónica de ayer los sintetizó así: “Lucharon, no alcanzó”. Esa es la verdad, no alcanzó. Con ese grupo y esa dirección técnica no alcanzó. Los políticos se subieron al show porque está en su naturaleza aprovechar cualquier oportunidad para aparentar que tienen empatía con el pueblo que gobiernan. Son actores que fingen faltas y sueltan hachazos.

Los directivos de la Federación, comenzando por el insufrible Yon de Luisa, salieron con aquellos de que durante las próximas semanas harán un análisis a profundidad para conocer las causas del desastre. Esto equivale a cuando los políticos resuelven crear una comisión para atender, sin resolver, un evento de alto impacto. Ambos, directivos y políticos, lo que quieren es ganar tiempo, que pase el temporal, que a la gente se le olvide, para no tener que rendir cuentas de su notable incapacidad. Cínicos consumados.

Yo me quedo con los miles de aficionados mexicanos bailando la coreografía de Payaso de Rodeo allá en el Medio Oriente, eso sube el ánimo. Para cerrar les tengo una buena noticia: ¡Ya estamos calificados para el Mundial 2026! Por la sencilla razón de que México será sede de ese evento, que tendrá partidos en la CDMX, Monterrey y Guadalajara, de modo que no tendremos que pasar por el vía crucis de las eliminatorias de la Concacaf donde de un tiempo a la fecha nos faltan al respeto en cada partido. Hasta nunca Qatar.