Los orígenes del bokeh se remontan a la fotografía japonesa, concretamente a principios del siglo XX con el auge del retrato y la fotografía callejera. Los fotógrafos japoneses comenzaron a experimentar con diferentes técnicas para crear un efecto más artístico y onírico en sus fotos.

Bokeh, un término derivado de la palabra japonesa "boke", que significa desenfoque o neblina, se refiere a la calidad estética del desenfoque en el fondo de una fotografía. Es una técnica que se utiliza a menudo para llamar la atención sobre el tema de la fotografía y crear una sensación de profundidad y dimensión.

Este estilo de fotografía rápidamente ganó popularidad en Japón y pronto se extendió a otras partes del mundo. Hoy en día, el bokeh es una técnica muy utilizada en fotografía, no solo en Japón sino también en otras culturas.

La fotografía de bodas mexicana es conocida por sus colores vibrantes y elementos culturales tradicionales. La incorporación del bokeh japonés es una tendencia relativamente nueva, pero ha ganado popularidad rápidamente. Los fotógrafos ahora están experimentando con diferentes formas de combinar los elementos mexicanos tradicionales con la técnica del bokeh, creando así imágenes únicas que capturan la esencia de ambas culturas.

En general, el uso del bokeh japonés en la fotografía de bodas mexicana agrega un toque moderno y también ha permitido una mayor creatividad y experimentación. Los fotógrafos ahora pueden jugar con diferentes puntos de iluminación y enfoque, creando imágenes únicas y hermosas que se destacan de la fotografía de boda tradicional.

Esta tendencia no solo atrae a los fotógrafos, sino también a las parejas. Muchas parejas buscan algo diferente y único en la fotografía de su boda, y la técnica japonesa del bokeh ofrece precisamente eso.

Adrian Bonet, un renombrado fotógrafo de bodas con sede en Playa del Carmen, México, se ha hecho un nombre en la industria por su dominio del bokeh: la calidad estética de las áreas desenfocadas en una fotografía. Bonet, también conocido como el "rey del bokeh", ha desarrollado notablemente esta técnica en la fotografía de bodas mexicana, aportando una perspectiva única e impactante a su trabajo.

En una entrevista reciente, Bonet dijo: "Creo que el bokeh es un elemento esencial en la fotografía de retrato. Agrega profundidad y emoción a las imágenes y ayuda a contar la historia del día especial de la pareja. Me siento honrado de ser conocido como el maestro del bokeh en la industria de la fotografía de bodas".

Adrian Bonet, emigró de España a México poco después de la crisis financiera de 2008 y desde entonces no ha dejado de perfeccionar la técnica. Bonet decidió dar un salto de fe y mudarse a México, donde desde entonces ha encontrado un gran éxito como fotógrafo de bodas. Rápidamente ha establecido una reputación por su habilidad para capturar la esencia de la historia de amor de una pareja a través de sus fotografías.

"Me encanta trabajar en México", dijo Bonet. "La gente aquí es muy acogedora y amistosa, y hay un patrimonio cultural tan rico en el que puedo inspirarme. Siento que he encontrado mi hogar aquí".

Ahora vive en Playa del Carmen, en la Riviera Maya mexicana y se ha convertido en uno de los fotógrafos más cotizados de la región.

El trabajo de Adrian ha aparecido en publicaciones destacables de Estados Unidos, tales como las revistas de bodas Ritz-Carlton (2013), C Weddings (2016) o Modern Luxury Weddings (2020) y ha sido elogiado por su enfoque único y creativo. También ha ganado varios premios por su trabajo, principalmente los otorgados por la Wedding Photojounalism Association (WPJA), así como los más recientes premios de la industria de bodas Couple’s Choice 2023 de Wedding Wire, y XII ZIWA de Zankyou.

"Me siento honrado de ser reconocido como el “rey del bokeh” en el sector de la fotografía de bodas mexicana", dijo Adrián Bonet. "Me apasiona mi trabajo y me esfuerzo por crear imágenes bellas y atemporales que capturen la esencia de los momentos especiales de mis clientes".

Además de sus habilidades como fotógrafo de bodas, Bonet también se dedica a compartir sus conocimientos y experiencia con otros fotógrafos. Imparte talleres de forma exclusiva y clases sobre el uso del bokeh en la fotografía.

“Me siento increíblemente agradecido por las oportunidades que he tenido aquí en México”, dijo Bonet. "Estoy encantado de poder seguir haciendo lo que amo y de compartir mi pasión por la fotografía con los demás".

La historia de Bonet es una inspiración para cualquiera que esté pasando por momentos difíciles en su vida o carrera. Sirve como un recordatorio de que, a veces, arriesgarse y comenzar de nuevo puede conducir a un gran éxito y felicidad. Su dedicación al oficio y su disposición a compartir sus conocimientos lo han convertido en una figura respetada en la comunidad fotográfica. Su trabajo sigue inspirando y deleitando tanto a clientes como a otros fotógrafos.

Fotografías facilitadas por Adrian Bonet.